En algunos estados el precio de la tortilla se acerca a 14 pesos el kilogramo debido a que las comercializadoras venden en más del doble el maíz, señaló la Confederación Nacional Campesina (CNC), y advirtió que no existen granos en los inventarios nacionales, por lo que se vive la peor crisis del último medio siglo.

Las heladas afectaron en total un millón 18 mil hectáreas, de las cuales 666 mil 324 reportan daño total y 352 mil 589 parcial, indicó Jorge Álvarez, miembro de la Comisión de Prevención de Desastres del Consejo Mexicano de Desarrollo Rural Sustentable.

El representante de la Confederación de Porcicultores Mexicanos detalló que en Sinaloa se afectaron 582 mil 835 hectáreas, en Tamaulipas 260 mil 764 y en Sonora 56 mil 245; los cultivos más dañados fueron de maíz, sorgo, garbanzo, papa, cártamo y hortalizas.

Por su parte, la CNC expuso  que las comercializadoras, sobre todo las trasnacionales, lucran con la tragedia de los campesinos debido a que durante meses monopolizaron la producción de maíz, la compraron a 2 mil 500 pesos la tonelada, mientras en estos momentos de crisis lo revenden hasta en 5 mil 500 en zonas rurales de estados como Guanajuato y San Luis Potosí, señaló la CNC, al precisar que esto ha llevado a que el precio de la tortilla se acerque a los 14 pesos el kilo. 

En un comunicado manifestó que el desastre agrícola del norte del territorio nacional es un problema de seguridad alimentaria, de seguridad nacional, debido a que, aunque aseguren lo contrario las autoridades, no existen granos en los inventarios nacionales y tampoco los hay en los internacionales y si no se toman decisiones de emergencia nos lo vamos a lamentar aún más.

Consideró lamentable que a los jornaleros agrícolas, ahora sin trabajo por las heladas, se les quite el Seguro Social. Esto afecta a unos 400 mil migrantes de Oaxaca, Veracruz, Puebla, entre otros estados, que viajan a Sinaloa.

Advirtió que los recursos que el gobierno federal tiene autorizados no son suficientes para resolver los problemas actuales de la agricultura nacional, por lo que pidió apoyo a los productores con subsidios al diesel agropecuario y con la restructuración de su cartera vencida.

Demandó que el gobierno federal asuma los intereses de los créditos de los productores debido a que no pueden pagar, no tienen dinero ni lo van a tener a corto plazo, por lo que se deben buscar políticas públicas que estimulen a los campesinos.

También pidió que parte de los excedentes petroleros que se han generado por el alza mundial en el precio del energético se destinen al apoyo de los productores del agro dañados por las heladas, y al país en general que se enfrenta a la peor crisis agrícola en 50 años. Esos recursos rebasan 300 mil millones de pesos, fondo económico de donde puede salir la reasignación presupuestal para el campo, indicó.