Con lemas exigen la caída del gobierno
de Bahrein
Domingo 20 de febrero de 2011, p. 29
Manama, 19 de febrero. Miles de manifestantes retomaron hoy la plaza de la Perla en esta capital, luego que el príncipe heredero de Bahrein, Salman Ben Hamad Jalifa, ordenó al ejército y la policía mantenerse al margen de las concentraciones
, en tanto que la Unión General de Sindicatos llamó a una huelga general indefinida a partir de este domingo, mientras el principal grupo opositor chiíta rechazó dialogar con el gobierno sunita y exigió su dimisión.
Enarbolando banderas blancas y rojas de Bahrein, los manifestantes gritaban lemas como el pueblo quiere la caída del gobierno
a pleno pulmón.
Los cientos de manifestantes instalaron tiendas en la céntrica plaza de Manama, la capital, de donde habían sido expulsados el jueves en un operativo policial que dejó cuatro muertos. Ayer, las fuerzas de seguridad abrieron fuego contra otras protestas, con decenas de heridos.
Las autoridades sunitas de esta pequeña monarquía petrolera del golfo Pérsico con mayoría de población chiíta ordenaron a los militares y a la policía mantenerse apartados de la plaza de la Perla.
Ordenamos a todas las fuerzas de seguridad que se retiren de inmediato de las zonas de protesta, como pedimos a las personas concentradas que abandonen el lugar para evitar cualquier choque
, dijo el príncipe heredero de Bahrein, Salman Ben Hamad Jalifa.
El rey Hamad Bin Isa Jalifa le ordenó al príncipe liderar un diálogo nacional con todos los partidos políticos, pero el principal grupo de la oposición, Al Wifak, se niega a negociar.
El Ministro de Sanidad, Faisal Jakub Hamar, habló de seis heridos durante la noche del pasado viernes, pero los médicos del hospital de Salmaniya informaron de al menos 66 tras la intervención de la policía contra los manifestantes.
Por lo pronto, la Unión General de Sindicatos hizo un llamado a la huelga general indefinida a partir de este domingo y el cierre de todos los colegios públicos y privados.
Demandan que se permitan las manifestaciones en la plaza de la Perla, la liberación de todos los prisioneros políticos, saber qué pasó con la gente desaparecida y la renuncia de los ministros del Interior y de Defensa, y del jefe de seguridad.