Medición Multidimensional de la Pobreza en México y el Mundo / II
Problemas editoriales y de la introducción del libro Coneval-Colmex1
mpiezo señalando algunas deficiencias editoriales del libro: 1) El índice de contenido sólo tiene los títulos de las propuestas pero no desglosa su contenido. En un libro de 662 páginas no desglosar el contenido de cada capítulo al principio del libro (o al menos al comienzo de cada propuesta) deja al lector en la oscuridad (casi) total. Si se recorre el libro se verá que incluye muchas decenas de subtítulos. 2) Un libro de este tamaño debería tener un índice analítico (autores y temas abordados), pero no es el caso. 3) Los títulos de algunas propuestas fueron alterados sin consultar a los autores, lo que lleva a la situación ridícula en el caso de mi propuesta, que se tituló Principios de la medición multidimensional de la pobreza
cuando ese es el título sólo del capítulo II de mi texto, que ocupa algo así como la sexta parte del total. Si bien el título que envié era muy largo, cambiarlo por uno que distorsiona su contenido resulta aberrante. No es sólo que se hayan cometido este tipo de errores editoriales, sino que la coordinación del volumen y la tarea de edición se encargaron a dos personas (Minor Mora y Nelson Minello) que al parecer no se comunicaban entre sí, como se apreciará en el texto que sigue. Tampoco queda claro si fue el editor de este volumen o el departamento de publicaciones de El Colegio los que eliminaron de un cuadro conceptualmente clave de mi propuesta (Cuadro II.1, p. 63) el sombreado que permitía su inteligibilidad, sin eliminar del texto la referencia a dicho sombreado, de tal manera que el texto dice (p.60) he sombreado estas últimas necesidades con un tono gris, mientras las primeras las he sombreado con un tono más claro
.
En la introducción al libro, escrita por Minor Mora, se describen cada una de las cinco propuestas metodológicas para cumplir con lo establecido en la Ley General de Desarrollo Social (LGDS) sobre la medición de la pobreza. Las presenta en orden alfabético por lo que empieza por mi trabajo. Lamentablemente, al parecer, Mora escribió este texto mucho tiempo antes del armado final de lo publicado de las cinco propuestas y no se enteró de los cambios que me vi obligado a hacer para acortar mi texto ante las presiones del editor (ignoro si pasó algo similar en otros casos). Pero al parecer Mora tampoco conoció la versión final (antes de los recortes) que, con el apoyo del Evalúa DF y la traducción de Héctor Figueroa, entregué en español. En dicha versión algunos temas abordados sin llamarles principios
en la versión en inglés, los sistematicé como principios y así están incluidos en el libro. Mora, en cambio, sólo menciona como principio
al del mínimo error
, lo cual se explica porque, en efecto, en la versión en inglés los subtítulos de la sección titulada Principios sólo mencionaban dicha palabra en este caso. El lector se puede confundir especialmente cuando después de leer en la introducción de Mora que abordo un principio (el del mínimo error), lee en las primeras páginas de mi texto, al describir los contenidos del trabajo, que abordo diez principios. Resulta entonces que, según el libro, un trabajo llamado Principios de...
se refiere a un único principio. Mora tampoco se enteró que, para complacer al editor, eliminé una larga sección del capítulo Marco teórico
que presentaba una tipología y una crítica de los principales métodos de medición de la pobreza disponibles a nivel mundial. Por ignorar la eliminación de esta sección, dice que mi propuesta “Continúa con una aguda crítica a los métodos unidimensionales de medición de la pobreza –línea de pobreza– y a los métodos multidimensionales de evaluación directa del bienestar, necesidades básicas insatisfechas. De aquí concluye la necesidad de adoptar un enfoque multidimensional en la medición de la pobreza”. Lo que comenta, ya no está en el libro pero el coordinador del mismo no fue informado al respecto. Lo que estaba en dicho texto incluía sin duda lo que dice Mora, pero también abordaba lo que llamo los métodos combinados de medición de la pobreza, que involucran tanto ingresos como necesidades básicas insatisfechas, que es justamente el planteamiento de la LGDS y, por tanto, de las cinco propuestas. El texto eliminado (ante las presiones, opté por su eliminación porque de todo el material original, era el único previamente publicado)2 incluye una crítica al método que David Gordon y su grupo (seguidores de Townsend) aplican en la Gran Bretaña y que en el libro que comentamos Gordon traslada, con muy poca adaptación, al caso de México, crítica realizada con la misma lógica con la cual cuestioné los métodos que menciona Mora. La descripción que éste hace es demasiado escueta y omite destacar la diferencia clave entre mi propuesta y las otras: el hecho de que en lugar de indicadores dicotómicos o binarios (que usan los demás autores en las dimensiones de NBI, con la posible excepción de Chakravarty) uso indicadores pluricotómicos y, por tanto, en lugar de una escala de ceros y unos, obtengo múltiples valores que cardinalizan o convierten en métrica las variables originalmente nominales u ordinales). Este asunto está bien mencionado al principio (sobre todo en un pie de página) pero Mora no hace notar que ésta es una de las diferencias más importantes de mi trabajo y los demás
Mora describe la propuesta de Satya Chakravarty de una manera que no permite al lector enterarse de su peculiaridad. El procedimiento usual consiste en identificar los hogares y personas pobres mediante el manejo de todos los indicadores, su combinación y la aplicación del criterio de pobreza dentro de cada hogar, y luego proceder a la agregación social calculando el porcentaje de pobres y otras medidas agregadas de pobreza. En cambio, Chakravarty hace siete veces la identificación y la agregación, una para cada dimensión marcada en la LGDS (excepto cohesión social) identificando los hogares y personas carenciadas en cada dimensión y calculando en ella el porcentaje de carenciados. Cuando ya tiene los siete porcentajes, los promedia y dice que el resultado es el porcentaje de pobres, pero omite decir que así no podemos saber cuáles hogares y personas son pobres, lo que parece esencial en cualquier método de pobreza. En los seminarios de 2007 en El Colegio de México le dije que lo que él hacía no era medición de la pobreza porque no da el primer paso de esta tarea: identificar a los pobres. La gráfica muestra resultados de su propuesta con umbrales definidos por Coneval. En su trabajo encuentro otro horrible error editorial: sus cuadros uno y 2 por entidades federativas omiten seis entidades federativas (desde Tabasco hasta Zacatecas). En próximas entregas abordaré las otras propuestas.
1 Me refiero al libro: Julio Boltvinik et al., Medición Multidimensional de la Pobreza en México, El Colegio de México y Coneval, 2010, 662 pp. En la entrega anterior (11 de febrero del 2011) comencé la reseña de este libro.
2 Una variante del texto eliminado con el título Métodos de medición de la pobreza. Una tipología. Limitaciones de los métodos tradicionales y problemas de los combinados
está incluida en Julio Boltvinik y Araceli Damián (coords.), La pobreza en México y el mundo. Realidades y desafíos, Siglo XXI editores, México, 2004, pp. 437-475.
http://julioboltvinik.org jbolt@colmex.mx