Cuernavaca, Mor., 19 de enero. La señora Andrea Martínez Jaimes reveló que la Secretaría de Marina (Semar) trata de entregarle dinero para que retire la queja que interpuso ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), en relación con la muerte de su esposo, Ignacio Aguilar Rodríguez, quien fue acribillado por marinos en diciembre de 2009 en la capital morelense.

Después de que la Semar rechazó las recomendaciones que le envió la CNDH, “vino gente de la Marina a mi casa y me dijeron que fuera a la ciudad de México; allá me recibió un teniente llamado Florentino Rodríguez Méndez, quien me dijo que ellos tenían el bien económico e iban a ayudar a la familia; me insistió en que entregara todos los papeles que me solicitaban y que a la brevedad se me daría el dinero. ‘¿Pero y derechos humanos, qué?’, me repetía a cada rato; o sea, tenía que retirar mi queja de la comisión”.

Aseguró que ella no está dispuesta a recibir unos pesos a cambio de que la muerte de su marido quede impune y no retirará su queja de la CNDH.

“Yo le dije al teniente que no estaba de acuerdo que se me condicionara; yo creo que si la comisión ya reunió las pruebas de que se cometió una injusticia de lo que se le hizo a Nacho, pues tienen que responder; no sólo con unos pesos se cura el dolor que nos causaron; la CNDH está luchando, junto con nosotros, para que alguien ponga un alto a estas personas y no sigan asesinando a inocentes”, expresó.

Reiteró que ella como viuda y su familia exigen que la Marina acepte los hechos, “porque las pruebas están y todo mundo sabe que ellos lo mataron; creo que no es justo que rechacen sus hechos y los errores que cometieron. No es justo que con unos cuantos pesos quieran cubrir todo; la vida de Nacho no tenía precio, no tiene”, subrayó.

Mencionó que ni su esposo ni la señora Patricia Terroba hubieran muerto en el fraccionamiento Limoneros si la Marina hubiera cercado la zona donde realizaron los operativos para capturar al capo de la droga Arturo Beltrán Leyva, El Barbas, el 16 de diciembre, fecha en que fueran acribillados ambos.

En cuanto a que su cónyuge iba alcoholizado, como ha declarado la Secretaría de Marina, afirmó que esa es otra de las mentiras de la dependencia. Al principio también dijeron que era sicario de Beltrán Leyva y que llevaba armas, pero es totalmente falso.

A su vez, José Martínez Cruz, vocero de la Comisión Independiente de Derechos Humanos, lamentó que la Secretaría de Marina, “que ahora goza de un poder extraconstitucional, trate de sobornar a la familia de Ignacio Aguilar Rodríguez y que la quiera obligar a recibir dinero para que se quede callada.

“Cuando hay responsabilidad de parte de las instituciones tienen que revisar su proceder para evitar que ocurran nuevos casos, y lo que estamos presenciando, desafortunadamente, es claro: ‘vamos a continuar haciendo eso y no importa que haya víctimas civiles‘. Con esto ratifica la Marina que va con todo y que no importan las bajas civiles que haya, ese es el problema”.