Arriaga, Chis., 7 de enero. El gobierno de Chiapas comprende la migración como un derecho y un fenómeno que nadie puede detener con barreras, muros, armas ni leyes fascistas, porque todos, de alguna forma, hemos sido migrantes y por ello tenemos la obligación de respetar a quienes buscan una vida mejor.

Así lo indicó el gobernador Juan Sabines Guerrero al visitar la casa del migrante Amor en la misericordia, durante un acto realizado fuera de agenda tras aterrizar en helicóptero en esta localidad a fin de respaldar la caravana Paso a paso por la paz.

Gobernar significa ser incluyentes y garantizar los derechos de todas las personas, pues de no ser así se gobernaría para un partido, una religión y un origen, y se caería en un régimen fascista, advirtió el mandatario.

Desdeñó las consecuencias de respaldar a los indocumentados por ser una causa irrenunciable, y recordó que Chiapas es la primera entidad donde se creó una Comisión de los Derechos Humanos para los Migrantes.

En respuesta y a nombre de la Pastoral de la movilidad humana del Episcopado Mexicano, el sacerdote Alejandro Solalinde dijo a Sabines que la única consecuencia que tendrá por presentarse en la Casa del Migrante es la bendición de Dios.

Antes del improvisado acto, el titular de la Fiscalía de Atención a Delitos contra los Migrantes de Chiapas, Enrique Méndez Rojas, dio a conocer que de más de 2 mil denuncias presentadas por agresiones, 50 por ciento ya se resolvió en favor de los afectados, y el índice de este delito se redujo más de 90 por ciento.

Sostuvo que en Chiapas no hay secuestros masivos de migrantes y reseñó que por instrucciones del gobernador no sólo se ha procedido contra agentes en retiro y federales, estatales y municipales en activo, sino contra 271 presuntos agresores capturados en flagrancia.

Andrea Hernández, secretaria para el Desarrollo de la Frontera Sur, dijo que el gobierno de Chiapas ve la migración como un eje transversal y al migrante como dueño del derecho a decidir dónde ir o dónde estar, y merecedor de justicia y acceso a todos los servicios, como salud, educación y seguridad laboral.

Refirió que el gobierno estatal ya documentó a 5 mil niños que al tener derechos los hacen extensivos a sus padres merced al programa federal de regularización migratoria; e insistió en que en Chiapas la protección al migrante es integral y el apoyo humanitario la primera necesidad.