Mazatlán, Sin., 4 de enero. El ayuntamiento local podría declararse en quiebra ante la deuda de 100 millones de pesos que le dejó la administración del priísta Jorge Abel López Sánchez, quien según el actual edil, Alejandro Higuera Osuna, no dejó ni un quinto para pagar la electricidad de la alcaldía ni para el pago de salarios.

Alejandro Higuera, militante del Partido Acción Nacional (PAN), aseguró que sólo hay dinero para pagar lo básico, pues la administración pasada dejó grandes deudas con proveedores, las cuales no se podrán cubrir con lo que se recaude por impuesto predial en 2011.

Anunció que pedirá ayuda al gobernador Mario López Valdez, ya que el municipio se encuentra en crisis financiera y están en riesgo salarios de la primera quincena de enero, incluso los del personal de seguridad pública.

El edil mencionó que se han detectado anomalías en el sistema municipal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF); además, 56 ex empleados de confianza formaron un sindicato no reconocido por el gobierno de Higuera y se detectaron más de 200 trabajadores no indispensables, los cuales inflaron la nómina del municipio en el DIF, el instituto de cultura y el centro municipal de artes, entre otras dependencias.