La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) investiga a por lo menos cuatro presuntos integrantes de una célula de una red de pederastas dedicada al almacenamiento y distribución de pornografía infantil mediante Internet.

El titular de la dependencia, Miguel Ángel Mancera Espinosa, explicó que los involucrados podrían estar relacionados con el grupo de ciberpederastas detenidos en abril del año pasado, entre ellos el sacerdote Rafael Muñiz López, actualmente prófugo, luego de que el juez 44 penal ordenó su reaprehensión.

En entrevista luego de dar una conferencia en el Centro de Estudios Superiores Navales de la Secretaría de Marina, señaló que pronto se darán a conocer nuevos resultados de la investigación que comenzó en 2009, y que ha llevado a realizar diligencias en otros estados.

Hasta el momento, la PGJDF ha logrado la detención de más de una docena de personas, quienes desde diversas entidades y por medio de foros, blogs y correos electrónicos intercambiaban, y en algunos casos comercializaban, imágenes y videos con escenas de sexo de adultos con menores.

En abril de 2009 fueron detenidos seis presuntos pederastas, entre ellas el sacerdote veracruzano Rafael Muñiz López, alias Lobo Siberiano, y Luis Alejandro Vergara Torres, ex empleado de la Secretaría de Relaciones Exteriores. Tres meses después fueron capturados seis más, todos ellos acusados de recopilar, almacenar y distribuir miles de imágenes de pornografía infantil.

Los implicados fueron detenidos en el DF y estados como Puebla, Nayarit, México, Veracruz, Hidalgo, Yucatán y Aguascalientes; además la PGJDF presume que pertenecían a una red internacional.

Los implicados, salvo el sacerdote, actualmente son procesados por los delitos de almacenamiento y distribución de pornografía infantil. En el caso de Muñiz López, había sido liberado luego de que el juez 44 penal reclasificó el delito del que se le acusaba, decisión que fue apelada por la PGJDF, la cual logró que se le volviera a girar orden de aprehensión, aunque se desconoce su paradero.