A partir del primero de enero del próximo año será obligatorio que los contribuyentes con ingresos superiores a 4 millones de pesos al año emitan facturas electrónicas; sin embargo, la adopción del nuevo sistema será paulatina, informó el Servicio de Administración Tributaria (SAT).

Pedro Canabal Hermida, vocero del organismo, señaló que quienes tengan facturas impresas podrán usarlas hasta agotarlas o hasta que venza su vigencia, que es de dos años. Además, las facturas de papel podrán seguirse usando, pero sólo para montos inferiores a 2 mil pesos.

En entrevista, el vocero del SAT, reconoció que pese a la campaña de información emprendida por la dependencia para promover la factura electrónica, todavía quedan muchas dudas entre los contribuyentes.

Descartó que la obligatoriedad de emitir facturas electrónica vaya a representar un gasto adicional para los negocios, debido a que el monto mínimo de cotización anual establecido por el SAT (de 4 millones de pesos) garantiza que se trata de empresas que ya cuentan con sistemas informáticos para llevar su contabilidad.

También rechazó que la medida pueda representar la quiebra de impresores autorizados de comprobantes fiscales en papel, debido a que, dijo, no es la única actividad que realizan.

Canabal refirió que la facturación electrónica existe como un esquema opcional para la emisión de comprobantes fiscales desde 2005. De entonces hasta octubre de este año se han expedido mil 150 millones de facturas electrónicas en el país, de las cuales alrededor de 70 por ciento se emitieron en 2010.

Pedro Canabal Hermida, vocero del SATFoto María Luisa Severiano

Agregó que quienes ya estén facturando de manera electrónica lo único que tienen que hacer, en el transcurso de 2011, son algunos ajustes en sus sistemas para que sean compatibles con los nuevos sistemas informáticos que van a estar rigiendo el sistema versión 2011.

Explicó que en la página de Internet del SAT los proveedores podrán descargar un software gratuito para la expedición de facturas electrónicas, aunque cada empresa podrá utilizar programas propios mediante el pago a empresas especializadas.

Dijo que la expedición de comprobantes fiscales digitales permite una reducción de 85 por ciento en los costos por facturación debido a que el costo promedio por usar facturas impresas es de 160 pesos frente a los 30 que cuestan las electrónicas.

La meta es que para los primeros 4 o 5 meses del año, poco más de 250 mil contribuyentes, principalmente los de alta capacidad administrativa, ya estén incorporados a la factura electrónica, más de la mitad del valor total de la economía, adelantó.

Respecto a la confiabilidad del nuevo esquema, dijo que cumple con los requisitos legales de los comprobantes tradicionales y garantiza la autenticidad de su origen y la integridad de su contenido.