En su misa dominical en la Catedral Metropolitana, el cardenal Norberto Rivera Carrera llamó a los fieles a “barrer” el egoísmo y la injusticia acumulados en la vida personal y social para luchar por una sociedad “donde la paz, la tolerancia y la convivencia fraternal sean posibles”. El arzobispo conminó a los feligreses a “convertirse”. Ello, dijo, no puede consistir sólo en “dejar de portarse mal”, sino en emprender una vida nueva, pues implica un profundo cambio de mentalidad. La conversión auténtica, resaltó, debe conducir a rechazar la injusticia, la violencia y el odio para implantar la justicia, la paz y la reconciliación.