En México hay una gran cantidad de niños talentosos que nunca son detectados y estimulados, por lo que sus capacidades no se desarrollan, y de esa forma el país desperdicia una reserva humana muy valiosa.

Por tal motivo el Programa Adopte un Talento (Pauta) busca estimular a estudiantes normalistas para que se acerquen a la ciencia de una forma lúdica y sencilla, y a su vez transmitan esa inquietud a sus alumnos, explicó Alejandro Frank, director del Instituto de Ciencias Nucleares de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Dicho esquema, promovido por la máxima casa de estudios en colaboración con la Secretaría de Educación Pública (SEP), surgió desde hace poco más de seis años –aunque cuenta con presupuesto desde hace apenas tres– y busca ser un puente entre niños, maestros y académicos para que más alumnos lleguen a la educación superior.

Por el momento, Pauta es aplicado en el Distrito Federal, Morelos, Chiapas y Michoacán, mientras se decide su implementación a escala nacional, y su objetivo es organizar talleres para que los alumnos de las escuelas normales se interesen en temas científicos, con un enfoque divertido y práctico.

La fuga de cerebros es una gotera de gente que por desgracia tiene gran preparación pero no encuentra trabajo en el país, pero el verdadero torrente es el interno. Son esos millones de niños que no han tenido acceso a la ciencia al nivel adecuado, y lo que nosotros queremos es generar una cultura científica para ayudarlos a interesarse en ese campo, explicó.

Ha sido extremadamente satisfactorio ver la reacción de los niños, los maestros y los padres de familia. Yo siempre he dicho que el proyecto científico más valioso del país son sus niños, porque los científicos en México somos muy pocos, apenas 10 o 15 mil, y es urgente despertar más interés al respecto.

Por su parte, Julieta Montelongo, encargada del proyecto Jóvenes Científicos de Pauta, consideró que el talento es un factor que puede ser cultivado y desarrollado, y por ello el esquema presenta diversas actividades sobre temas científicos, como la selección natural, el aire o la flotación de los cuerpos en el agua, para que los estudiantes los aborden y resuelvan en equipo.

En la ciudad de México, los museos Universum y Tecnológico son la sede permanente de las charlas y talleres, que se imparten a alumnos de diversos niveles, desde primaria hasta licenciatura o posgrado, con el fin de estimular su imaginación, lógica y capacidad de argumentar ideas.