El Gobierno del Distrito Federal espera recaudar entre 150 y 200 millones de pesos adicionales con el incremento a las tarifas por el consumo de agua potable para el próximo año, que serían destinados a obras de drenaje y la sustitución de medidores.

Así lo aseguró el titular de la Tesorería del Distrito Federal, Luis Rosendo Gutiérrez Romano, quien consideró que sería suicida no aplicar este aumento, ante el alza en el costo de los insumos para garantizar el servicio en la capital.

Durante su comparecencia ante diputados que integran las comisiones de Presupuesto y Cuenta Pública y Hacienda de la Asamblea Legislativa, el servidor público aseguró que el ajuste de 7.7 por ciento, por arriba de la inflación, significaría para 70 por ciento de los hogares de la ciudad, los cuales tienen boletas de hasta 200 pesos bimestrales, un pago de alrededor de 3.5 pesos al mes (10 centavos diarios por familia).

Esta cifra aumentaría a 15 o 30 pesos para quienes pagan por el servicio por arriba de mil pesos, tres por ciento de los usuarios, y se reduciría a 50 centavos para aquellos con boleta de 30 pesos bimestrales.

Gutiérrez Romano detalló que entre los insumos para potabilizar y suministrar el líquido que incrementarán sus precios para el próximo año se encuentra el cloro, con 15 por ciento, la electricidad, con 12 por ciento, y el bloque de agua por parte de Conagua, cinco por ciento.

Argumentó que, incluso, el cambio climático, es un factor que motiva el ajuste en el cobro del suministro, pues se ven sometidos a diferentes presiones por las variaciones en el clima.

Señaló que también se busca motivar el ahorro en el consumo del agua, pues hasta ahora ninguna campaña publicitaria ha dado mejores resultados que el alza en las tarifas. En el caso del líquido de uso doméstico el consumo bajó 10 por ciento, mientras que el no doméstico en 12 por ciento, refirió.

Recordó que el consumo per cápita en el Distrito Federal se encuentra todavía entre 30 y 50 por ciento por arriba de ciudades con un desarrollo similar.

Sostuvo que aún con el incremento, el Distrito Federal se mantendría como la entidad con las tarifas por el consumo de agua potable más bajas del país, incluida la zona metropolitana.

Ejemplificó que en Amecameca se tiene previsto un incremento de 16 por ciento por arriba de la inflación, Atizapán, Naucalpan y Huixquilucan de 8.5 por ciento, Metepec, Zinacantepec y Tlalnepantla, 6 por ciento.

El presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, Erasto Ensástiga, aseguró que el tema de las tarifas no es asunto concluido, por lo que aunque le corresponde la decisión a la Asamblea Legislativa, buscarán alternativas, junto con el gobierno capitalino.

Barrales pide no politizar un problema real, como el abasto y la distribución del líquido

Gabriela Romero Sánchez

Con el propósito de elaborar una nueva propuesta de ajuste a la tarifa del agua, el Gobierno del Distrito Federal y la Asamblea Legislativa instalaron ayer una mesa de trabajo.

Al salir de la reunión que sostuvieron con el jefe de Gobierno del DF, Marcelo Ebrard, el secretario de Finanzas, Armando López; el tesorero, Rosendo Gutiérrez, y el director del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, Ramón Aguirre Díaz, la presidenta de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa, Alejandra Barrales, pidió no politizar un problema que es real como el abasto y distribución del líquido en la ciudad de México.

Puntualizó que el jefe de Gobierno y los diputados del sol azteca comparten la preocupación del impacto que el ajuste traería en la economía de los ciudadanos, por eso vamos a generar alternativas.

–¿El ajuste en las tarifas podría ser menor al 7.7 por ciento propuesto por el Gobierno del DF? –se le preguntó.

–Es probable, nos preocupa el impacto que esto pueda tener, pero debemos ser responsables y reconocer que hay una problemática de abasto de agua –respondió Barrales Magdaleno.

Aclaró que ni la Asamblea ni el gobierno estamos casados con ninguna idea, el propio gobierno lo reconoce, nuestra intención no es afectar a nadie, por el contrario es ayudar y actuar de manera responsable.

Barrales Magdaleno dijo que si se compara la tarifa de agua que hay en el DF con la de otras entidades, aún si lleváramos ese ajuste (7.7 por ciento) en la tarifa, que no está confirmado, aún así seríamos el estado que cobra más barato por el abastecimiento del líquido.

Advirtió que no es problema menor. La salida más sencilla sería lavarse las manos y decir que lo arregle otro gobierno, pero esa no es nuestra posición.