Roma, 30 de noviembre. Estudiantes italianos opuestos a la reducción de gastos marcharon este martes en Roma y la policía les cerró el paso cerca del Parlamento, donde legisladores votaban una reforma educativa que desató una de las mayores protestas en décadas. En el Reino Unido miles de estudiantes se movilizaron por tercera vez contra el alza de los costos de matrícula en las universidades.

Los estudiantes italianos que la semana pasada ocuparon los sitios turísticos más visitados del país como la Torre de Pisa y el Coliseo, prometieron bloquear los cambios propuestos por la ministra de Educación, Mariastella Gelmini.

Miles de estudiantes marcharon desde el centro de Roma hacia el Parlamento, cantando y enarbolando pancartas con lemas como la educación está de rodillas, al tiempo que lanzaban huevos, vegetales, botellas y petardos hacia el Parlamento.

Los estudiantes se enfrentaron brevemente con policías antidisturbios al intentar aproximarse al edificio.

Protestas similares ocurrían en otras ciudades italianas.

Queremos ver una reforma desde las bases, no una que proviene de los pasillos del poder, dijo Tommaso Ricci, estudiante de matemáticas de la Universidad de Florencia.

Gelmini señala que las reformas, que pretenden ahorrar varios miles de millones de euros para finales de 2012, crearán un sistema que se enfoque más en el mérito.

No obstante, opositores dicen que las universidades ya tienen una escasez de fondos de mil 350 millones de euros el próximo año y las planeadas reducciones debilitarán aún más el elevado sistema educativo italiano.

Gelmini advirtió a los legisladores, quienes hicieron enmiendas menores al paquete para satisfacer a estudiantes y profesores, que retirará la reforma si se hacen muchos cambios.

En Reino Unido miles de estudiantes desafiaron la nieve y el frío este martes en Londres y otras ciudades para protestar por tercera vez en un mes contra la triplicación del costo de las matrículas universitarias.

Unas 8 mil personas, según los organizadores, participaron en la manifestación londinense, que comenzó de manera ordenada en la plaza de Trafalgar y se convirtió rápidamente en un juego del gato y del ratón entre los policías y los manifestantes que se dispersaron por todo el centro de la capital, interrumpiendo el tráfico en varios puntos.

El estado del tiempo ocasionó que la protesta fuera menos imponente que otras en las que han participado hasta 50 mil pesonas.

Los estudiantes rechazan el plan anunciado recientemente por el gobierno de coalición de conservadores y liberaldemócratas que podría triplicar el precio de las matrículas universitarias llevándolas hasta 9 mil libras en el contexto de un recorte de las partidas estatales destinadas a las universidades.

Creo que es asqueroso que suban las matrículas, declaró Melinda Jones, estudiante de 20 años del University College London.