La Cámara de Diputados, con un presupuesto este año de 4 mil 943 millones de pesos, continúa siendo fuente de subsidios para legisladores, funcionarios y sus colaboradores.

Desde el Comité de Administración, la Cámara autoriza rembolsos de operaciones en hospitales privados, seguros médicos compras de computadoras, viajes y pagos de telefonía celular que quedaron a deber ex legisladores, entre otros rubros.

Críticos de los festejos del Bicentenario, los diputados quieren instaurar su propio monumento en San Lázaro, y además autorizaron 1.2 millones de pesos para una medalla a mexicanos de 100 años de edad o más, y 763 mil pesos para lonas con las imágenes de los héroes patrios, que colgaron en el frontispicio del Palacio Legislativo.

Para 2011, de acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación, la Cámara contará con 5 mil 444.1 millones de pesos, monto superior en 500.4 millones al de este año, y de éstos 120 se destinarán a la renovación del tablero electrónico de asistencia, que permitirá a los legisladores seguir las sesiones y votar virtualmente desde sus iPad o iPhone.

Al inicio del segundo año de la 61 Legislatura, el 3 de septiembre pasado, el Comité de Administración –que aún presidía el priísta Heliodoro Díaz– tomó dos decisiones sobre los teléfonos celulares que los diputados de la 60 Legislatura no devolvieron o bien no pagaron sus adeudos con las compañías telefónicas.

A partir de la definición del artículo 6 de la Norma para la asignación y uso de telefonía convencional y celular, respecto de que los equipos serán considerados bienes de consumo, el Comité decidió dar de baja del inventario los aparatos que ex diputados se llevaron. Además, argumentó el comité, como señala el acta de esa sesión, los teléfonos se consideran desechos peligrosos, por lo que su acumulación representaría para su manejo y desuso un costo adicional a la Cámara.

El mismo día decidió pagar las deudas de seis diputados a compañías telefónicas, por 71 mil 906 pesos. De éstos, 12 mil 785.22 pesos eran del ex diputado de Nueva Alianza Ariel Castillo Nájera; 24 mil 722.94, del ex diputado del PAN Carlos Albergo García González, y 11 mil 113.81 de su compañero de bancada Cruz Pérez Cuéllar.

Asimismo, 14 mil 69 pesos de la ex diputada Patricia Obdulia Castillo Romero, de Convergencia, y 9 mil 215 pesos del ex diputado del PRI Arnoldo Ochoa González, quien fue gobernador interino de Colima tras la muerte del gobernador Gustavo Vázquez Montes.

También en la misma fecha se aprobó pagar 25 mil 5 pesos a directivos del CENDI, debido a que estaban incomunicados porque el edificio, inaugurado el año pasado, no contó con una línea telefónica fija de enero a septiembre de este año.

Más aún, se autorizó a la Secretaría General de la Cámara rembolsar al presidente de la Comisión de Gobernación, el panista Javier Corral, 36 mil 448.45 pesos causados por la intervención quirúrgica a que fue sometido, pero no aclara de qué tipo.

El 30 de septiembre, el comité –ya bajo la presidencia del panista Marcos Pérez Esquer– avaló la petición del secretario técnico de la comisión que preside Corral, Luis Villegas Montes, de cargar al techo presupuestal de esa instancia legislativa, una computadora que ya había comprado por 29 mil 999 pesos, aunque se autorizó con la condición de que se incluyera en el inventario de la Cámara.

El rubro de gastos médicos es uno de los que más presionan el presupuesto de la Cámara.

En su sesión del 6 de octubre, el comité decidió un ajuste por 231 mil 162 pesos al seguro de gastos médicos mayores de altos funcionarios, contratado con la firma Metlife.

Para los diputados, el monto de la prima anual es de 35 millones 927 mil 430 pesos (71 mil 854.96 pesos por cada uno), pero el diputado Eric Rubio –quien durante el Mundial de futbol propuso llamar a comparecer al técnico Javier Aguirre– optó por contratar su propio seguro. La Cámara le ha devuelto 93 mil 154 pesos.

En la sesión del 31 de agosto, la última antes del cambio de la mesa directiva, el Comité de Administración votó en favor de la solicitud del ex director de Comunicación Social, Juan María Naveja –empleado de Francisco Ramírez Acuña–, para destinar un millón 650 mil pesos a la compra de tres camionetas y tres motocicletas, de un remanente de equipo para esa área.

Una de las Van adquiridas era utilizada por Naveja, quien argumentó al Comité que dada su jerarquía no podía transportarse en una camioneta vieja.