La Habana, 7 de noviembre. La oposición y la Iglesia católica se mantenían hoy a la expectativa de la decisión oficial para liberar a los 13 últimos presos del grupo de disidentes detenidos y sentenciados en 2003, al cumplirse el plazo fijado para que todos salgan de la cárcel.

El pasado 7 de julio el gobierno ofreció a la Iglesia católica que todos los integrantes del Grupo de los 75 que aún estaban detenidos serían excarcelados en un plazo de tres a cuatro meses, a partir de entonces.

Hay que seguir esperando que se tomen las decisiones que contribuyan a aliviar el sufrimiento y estas expectativas, que de alguna manera están creando zozobra, inquietud, en los sentimientos de las esposas y otros familiares de los que continúan en prisión, dijo a la prensa el secretario ejecutivo de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba (COCC), José Félix Pérez.

Hay que confiar en que se tomarán las mejores decisiones, al menos las más serenas o más sabias, agregó el sacerdote, párroco del templo de Santa Rita, en el barrio residencial de Miramar.

Como cada domingo desde hace siete años, las Damas de Blanco –el grupo de esposas y familiares de los presos de 2003– asistieron a la misa matutina a Santa Rita y luego marcharon por el camellón de la Quinta Avenida, reclamando la liberación de sus parientes.

Laura Pollán, quien encabeza al grupo, contó que tanto la Iglesia como la embajada de España les ha pedido esperar la decisión oficial, con la certeza de que se cumplirá el ofrecimiento. Vamos a esperar hasta las doce de la noche, a ver qué sucede.

Hemos pedido que se ablande el corazón de los gobernantes para que cumplan lo que han prometido, añadió Pollán.

El ofrecimiento oficial de liberar a los 52 del grupo de sentenciados en 2003, que aún estaban presos en julio, se ha cumplido lentamente. Hasta ahora 39 de ellos han salido de la cárcel y viajaron a España, con familiares.

Adicionalmente, el gobierno ha decidido excarcelar a otros 14 presos, que no forman parte de ese grupo de opositores, y que estaban sentenciados en su mayor parte por intentos de salida ilegal del país, en algunos casos con violencia. Algunos ya han viajado a España.