En la negociación del gasto para 2011 el enfoque de los grupos legislativos será el reparto de 100 mil millones de pesos de reasignaciones, de los cuales buscan destinar 25 mil millones a constituir el denominado Fondo de Cohesión Social para atender personas en municipios de alta marginación y dar un giro a la política social del gobierno federal.

El PAN respalda el proyecto enviado por el jefe del Ejecutivo para incrementar los montos a la militarización y acciones de seguridad en el país, aunque con ello se aplicaría un recorte a educación, salud y cultura. Además, la intención del panismo es ejercer un control férreo sobre el manejo de las transferencias federales a los estados.

Mientras, en las posturas presentadas de manera preliminar en la Comisión de Presupuesto dos semanas antes del plazo para votar el gasto para 2011, el PRD plantea enfocar la reasignación de los 100 mil millones de pesos a productividad, becas y empleo para jóvenes, y prevención y seguridad alimentaria.

De acuerdo con el documento Impulso productivo para la equidad territorial, que aprobó la bancada priísta, la política social del gobierno federal no ha podido acotar la pobreza. En cambio, en los dos primeros años de la actual administración 5.1 millones más de personas cayeron en pobreza alimentaria, 6.1 en pobreza patrimonial y los índices de pobreza son similares a los de 2005.

Difícilmente se alcanzará la meta de reducir de 24.1 por ciento a 12 por ciento los índices de pobreza. Por ello es necesario reforzar la política social y darle mayor alcance en el presupuesto, señala.

La intención del PRI es reorientar los recursos del ramo 33 a municipios de 26 estados para construcción, preservación y recuperación de infraestructura económica y productiva en las zonas de mayor rezago.

El tricolor, señala, busca corregir con criterio redistributivo la inequidad territorial nacional a partir de la visión, necesidades y planeación locales.

Los 25 mil millones de pesos, indica, se distribuirán a los municipios más pobres mediante una fórmula sin criterios partidistas, con la que los primeros estados serán Chiapas, Veracruz, Oaxaca, Guerrero y Puebla, y se solicitará al Consejo Nacional de Evaluación realizar un estudio bianual de resultados y desempeño, que serán revisados por la Cámara.

Los priístas pretenden que el proyecto continúe en 2012 –cuando se renovará la Presidencia de la República–, pero con 45 mil millones de pesos.

En entrevista, el diputado Armando Ríos Piter (PRD) afirmó que más allá de la vocación y el interés partidista los grupos legislativos en la Cámara están obligados a confeccionar un Presupuesto de Egresos que repare las desviaciones en el manejo del gasto por el gobierno federal.

Refirió que la Comisión de Presupuesto ha hecho apenas aproximaciones de prioridades y que la negociación fina se iniciará una vez que se designe a los tres nuevos consejeros electorales del IFE.

Explicó que para el PRD existen tres prioridades: destinar más recursos al campo para dejar atrás la economía de guerra, que mantiene a los productores en el abandono y los obliga a optar cada vez más por la migración o el narcotráfico; recuperar los recursos de la inversión productiva, y ejemplificó que el proyecto de Calderón considera un recorte por 14 mil millones de pesos a Comunicaciones y Transportes.

Y una agenda de presupuesto para los jóvenes, para evitar que continúe perdiéndose el bono demográfico. Ello implica, enfatizó, incrementar la partida de becas para alumnos de preparatorias y recuperar los 3 mil millones de pesos que el Presidente propuso recortar al sector cultura.

Ríos Piter planteó que la negociación también incluye etiquetar 12 mil millones de pesos adicionales por recaudación de IEPS a programas de salud.