El Senado aprobó ayer reformas a la Ley General de Educación, por las que se crea un padrón de alumnos, docentes e instituciones a escala nacional; se transparenta el uso de los recursos públicos y se instituye el registro nacional de emisión, validación e inscripción de documentos académicos.

Ricardo Monreal, del PT, cuestionó que no se tenga información confiable de cuántos maestros comisionados hay en el país, ya que se tiene la certeza de que se dedican a actividades electorales. El dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Rafael Ochoa Guzmán, respondió de inmediato:

Basta ya de seguir tratando de endilgar el problema a una sola persona o un sector; esas gentes que dicen que los comisionados se ocupan para actividades electorales los conmino a que hagamos un ejercicio muy simple de lo que sucedió en su entidad cuando fueron gobernantes en turno.

El también senador de Nueva Alianza advirtió en tribuna: tengo el registro de muchas de esas gentes que fueron comisionadas a muchísimas actividades, menos a la docencia, pero por la autoridad en turno.

La presidenta de la Comisión de Educación, la senadora panista, Teresa Ortuño, dijo que con las modificaciones a la ley se pretende crear, con los recursos con que ya cuenta la autoridad educativa, un sistema nacional de información que permita regular, coordinar y operar los avances y el desarrollo de alumnos, docentes e instituciones y centros escolares.

El senador del PRD Francisco Castellón dijo que el padrón de alumnos, maestros, instituciones educativas es el aporte fundamental de este dictamen. ¿Por qué razón? Para dar certidumbre no sólo a la ciudadanía, sino a las instituciones del Estado, incluyendo los gobiernos estatales, para definir cuántos profesores se tiene, cuántos alumnos y cuántas escuelas.