La jefa delegacional de Iztapalapa, Clara Brugada Molina, se pronunció por mantener la soberanía alimentaria y evitar que las trasnacionales cultiven maíz. Propuso ver a este grano como un recurso nacional, ya que ello contribuirá a mantener la identidad del país.

Por su parte, Jaime Ortega, representante de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) de Iztapalapa, expuso que el maíz es una de las cuatro plantas más reconocidas, lo que ha permitido que la gastronomía mexicana se ubique entre las cinco más importantes del mundo.

Al inaugurar la octava Feria de la Enchilada, la titular de la demarcación anunció que el próximo 17 de octubre se preparará la enchilada más grande del mundo, donde estará reunida toda la cadena productiva de este tradicional platillo mexicano: trabajadores, restauranteros, la sociedad y el gobierno.

“La enchilada es de los norteños, los potosinos, los chilangos, los costeños, es de todos”, agregó.

Brugada Molina adelantó que el platillo se preparará el próximo domingo en la explana del Jardín Cuitláhuac y ya tiene nombre: de la milpa de Iztapalapa. Tendrá una longitud de 120 metros, con lo que se pretende romper el récord Guinness.

En la elaboración participarán 250 representantes de los restaurantes de la demarcación, que utilizarán 720 kilos de tortilla. Cada empresa se encargará de una parte de la enchilada que degustarán más de 2 mil personas.