La propuesta de crear el mando único policial no sólo busca fortalecer la capacidad del Estado para reaccionar eficazmente ante el delito, sino que, si la aprueba el Congreso, proporcionará el marco adecuado para la prevención de ilícitos y convertirá los cuerpos de seguridad pública de los tres órdenes de gobierno en corresponsables efectivos en el combate a la criminalidad, afirmó el presidente Felipe Calderón.

Al encabezar la ceremonia de reconocimiento al valor y el mérito de la Policía Federal, Calderón firmó la iniciativa de reforma a los artículos 21, 73, 115 y 116 de la Constitución, con lo que se pretende homologar la política de seguridad pública en los estados.

Se busca prever los casos en los cuales la policía de un orden de gobierno –ante el debilitamiento o la vulnerabilidad institucional– pueda y deba intervenir en una corporación del nivel inferior (estatal sobre municipal o federal sobre estatal).

Los grandes retos implican cambios. Se trata de una iniciativa compleja, ambiciosa y que rompe con muchos paradigmas. Establece propuestas controversiales que han sido y deberán seguir siendo discutidas en la opinión pública y, especialmente, en el seno del Congreso, afirmó.

Este golpe de timón en materia de seguridad comienza por buscar poner orden en la competencia y los mandos de las policías locales con el fin de que exista mayor coordinación.

Pretende que se homologue el sistema de reclutamiento, selección e implementación de controles de confianza de las policías en todo el país, así como el de reconocimientos, ascensos, prestaciones e ingresos.

Propone que cada estado cuente con un cuerpo policial bajo el mando único del gobernador, quien nombrará al titular.

Incluye, entre otras propuestas, que esa corporación se encargue de salvaguardar la integridad, los derechos, las libertades y el patrimonio de las personas, así como de preservar y restablecer el orden y prevenir la violencia y los delitos.

La iniciativa plantea estrictos requisitos para acreditar el cuerpo de policía de un municipio.

Se trata de que, en los casos en que el municipio pueda por sí solo sostener la actividad policial con verdadero profesionalismo, en las corporaciones respectivas existan ingresos, capacitación y operación homólogos.

Mencionó que en los casos en que los ayuntamientos acrediten la confiabilidad y operabilidad de sus policías, éstas realizarán funciones de proximidad vecinal, vigilancia y aplicación de los bandos y reglamentos municipales, pero también deberán coadyuvar con la policía estatal, bajo su mando, cuando así se requiera, en las tareas y los fines de la seguridad pública.

La reacción inmediata en contra de los delitos será corresponsabilidad de las policías Federal, estatales y municipales, agregó Calderón.

Las policías municipales también estarán bajo el mando del gobernador, quien designará a su titular a propuesta del alcalde correspondiente, señaló. Con esta disposición se facilita la coordinación de las fuerzas estatales y municipales, y de éstas con la Policía Federal.

Se plantea la posibilidad de instituir corporaciones metropolitanas en zonas donde así convenga para que sea eficiente la acción policiaca y evitar la descoordinación entre órganos municipales conurbados.

Somos conscientes de que los requisitos para acreditar una policía municipal serán estrictos y en ocasiones difíciles de cumplir, pero por ello en los municipios donde no haya un cuerpo policial será la propia policía estatal quien deba garantizar la seguridad pública. Se trata de una de las reformas más importantes en la lucha por la seguridad.

Calderón explicó que la distinta capacidad de organización, financiamiento y fuerza de la delincuencia ha limitado la posibilidad de reaccionar con determinación y de manera coordinada ante los problemas de seguridad pública, que por disposición constitucional es tarea no sólo del gobierno federal, sino también de estados y municipios.

Reiteró que actualmente más de 90 por ciento de los delitos que se cometen en el país corresponden al fuero común, entre ellos el robo, la extorsión, el secuestro y el homicidio.

Las corporaciones estatales y municipales representan más de 90 por ciento de la fuerza policial del país.

Así, mientras la Policía Federal tiene alrededor de 33 mil integrantes –la gran mayoría reclutados en los últimos tres años–, las policías estatales y municipales reúnen más de 400 mil.

Al acto, celebrado en el Centro de Mando de la Policía Federal, asistieron, entre otros funcionarios, los secretaríos de la Defensa Nacional, general Guillermo Galván; Marina, almirante Mariano Francisco Saynez; Gobernación, Francisco Blake; Seguridad Pública, Genaro García Luna, y Hacienda, Ernesto Cordero.