Por primera vez en la historia de la entrega de la medalla Belisario Domínguez la decisión en el Senado podría no adoptarse por consenso, sino por mayoría. El PAN insiste en que el galardonado sea Luis H. Álvarez; PRI, PRD, PT y la mayoría de legisladores del PVEM respaldan la candidatura de Javier Barros Sierra.

Ayer, luego de una reunión de más de dos horas, no hubo acuerdo en la Junta de Coordinación Política (JCP) y se decidió seguir la discusión. Sólo se convino que la ceremonia de entrega de la presea se realice el próximo día 27, en sesión solemne a la que asistirá el Presidente de la República.

En la discusión en la JCP, de acuerdo con varios asistentes, priístas y perredistas argumentaron que por ser año del bicentenario de la Independencia, el centenario de la Revolución y los cien años de la fundación de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el galardón debe otorgarse al ex rector Barros Sierra. Los panistas sostuvieron que este año les toca proponer candidato, además de que Álvarez es un hombre mayor que debe ser homenajeado en vida.

Se propuso a la bancada del PAN que elija candidato el próximo año, pero el coordinador José González Morfín dijo que el ex dirigente panista tiene 92 años. Recordó que la medalla Belisario Domínguez se entregó a Antonio Ortiz Mena cuando había fallecido, porque un año antes, cuando el PRI impulsó su candidatura, correspondió al PRD decidir y el galardonado fue el periodista Miguel Ángel Granados Chapa.

El perredista Carlos Navarrete señaló que si bien al inicio de la legislatura se adoptó el criterio de que cada año una de las tres principales fuerzas políticas propusiera candidato, siempre debió lograr el consenso de las demás.

En encuentros previos a esa reunión PRD y PRI reafirmaron que su candidato es Barros Sierra. En la mañana votamos por el ex rector de la UNAM y nos vamos a sostener. Buscaremos un acuerdo; pero en un escenario de desacuerdo que cada quien se quede con su candidato y votamos, dijo el perredista Silvano Aureoles.

Pablo Gómez, del PRD, protagonista del movimiento estudiantil de 1968, sostuvo que homenajear a Barros Sierra es un acto de justicia histórica, ya que se trata de uno de los rectores que defendió con mayor valentía a la UNAM frente al presidente represor Gustavo Díaz Ordaz.