La técnica de neuromodulación puede eliminarla del todo, dice
Lunes 4 de octubre de 2010, p. 39
Aunque suele considerarse una enfermedad incurable, la fibromialgia puede ser tratada e incluso eliminada del todo mediante la técnica de neuromodulación, cuyo método busca que el sistema cuerpo-mente recupere la capacidad innata que tiene para sanar.
Este padecimiento, que sufre entre 2 y 5 por ciento de la población de México, España y Estados Unidos –con una proporción aproximada de nueve mujeres por cada hombre–, suele tratarse en la medicina alopática mediante analgésicos y antidepresivos que sólo ayudan a controlan los síntomas, pero afirmar que no hay remedio posible es un error, afirmó en entrevista con La Jornada la sicóloga Diana Morales.
La fibromialgia, que se caracteriza principalmente por dolor generalizado, cansancio excesivo, alteraciones del sueño, problemas gástricos, adormecimiento de las extremidades y dolores de cabeza, suele generar además depresión e irritabilidad en los pacientes.
Si bien todavía no se ha identificado una causa precisa que provoque esta dolencia, se ha observado que en ciertos casos se ha desencadenado después de una experiencia traumática o alguna enfermedad infecciosa, aunque el estrés sería uno de sus principales detonadores, explicó Morales.
El 90 por ciento de mis pacientes son mujeres aprehensivas, perfeccionistas, con un mal manejo de sus emociones, y bajo estrés severo. Los pacientes con fibromialgia, en general, viven en un estado casi permanente de alerta
, definió la especialista.
La teoría detrás de la técnica de neuromodulación es que la enfermedad es resultado de un desorden informativo
del cuerpo-mente. Cuando la percepción que éste tiene de sus condiciones internas y externas es equivocada, también lo serán sus elecciones fisiológicas.
Por medio de protocolos o fórmulas clínicas, este método logra generar conciencia en nuestros sistemas de dónde se encuentran las fallas de información para después corregirlas
, señaló.
Luego de formular la corrección, la terapeuta refuerza ese acto mediante estímulos suaves en algunas partes del cuerpo. Aunque depende de cada organismo y padecimiento, los tratamientos suelen ser breves, en el caso de fibromialgia 15 sesiones, en promedio.
Según Morales, de cada 10 pacientes con fibromialgia que trata, alrededor de 90 por ciento resuelven su dolencia completamente, y 10 por ciento restante lo lleva a un nivel manejable.
En ningún momento recomendaría que un paciente dejara su tratamiento alopático si no quiere, aunque en algunos casos sí es posible hacerlo. Muchas críticas al método se deben a que la gente tiene miedo de romper con los esquemas y límites de la medicina tradicional
, señaló la especialista.