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La artista francesa inaugura su muestra Rumores, en el Museo Amparo de Puebla

Una obra de arte es verdadera cuando toca todos los sentidos, afirma Messager

Reúne una treintena de obras de instalación, dibujo, intervención fotográfica y collage

Después de su escala en Puebla, se exhibirá en el Antiguo Colegio de San Ildefonso

Foto
Aspecto de la exposición de Annette Messager, en el Museo Amparo, de la ciudad de Puebla
La Jornada de Oriente
Periódico La Jornada
Sábado 2 de octubre de 2010, p. 5

Puebla, Pue., 1º de octubre. Una verdadera obra de arte debe tocar todos los sentidos del ser humano, más allá del visual y auditivo, asevera la creadora Annette Messager, leyenda del arte del siglo XX, quien se encuentra en Puebla para inaugurar este sábado su exposición Rumores, una retrospectiva de su trabajo, en el Museo Amparo.

Tal aserto, sin duda, lo sustenta en la muestra que llegó a esta ciudad procedente del Museo de Arte Moderno de Monterrey.

Rumores reúne una treintena de piezas en diversas técnicas, como instalación, dibujo, intervención, fotografía, collage y ambientación, para despertar la parte lúdica y voyerista del espectador.

Como ejemplo está la instalación móvil, con sonido, Articulés-Desarticulés, aclamada en Documenta XI, en Alemania, que integra fragmentos de marionetas (brazos, piernas y manos) junto a enormes animales de peluche que se arrastran en el suelo y “aluden al problema de las vacas locas en Europa”, explicó Messager.

Ternura y transgresión

La artista de origen francés explora el aspecto luminoso y sombrío de nuestros deseos, la ternura y la transgresión, el temor y la serenidad. Juega con elementos cotidianos para mostrar que es posible vivir con placer todas nuestras experiencias.

También se incluye la instalación Casino (2005), que ha causado impacto en el mundo del arte, y por la que recibió el León de Oro en la 51 Bienal de Venecia.

Casino recrea un pasaje de las entrañas de una ballena, cuando el personaje Pinocho es devorado por el cetáceo. Consiste en una enorme tela color carmesí que da la ilusión de una ola en movimiento, gracias al viento que producen las aspas de unos ventiladores. Dentro de una habitación a media luz, del techo descienden máscaras negras del rostro de Pinocho, visto de frente, que más bien parecen figuras fálicas.

A decir de la artista, estos elementos reflejan el vínculo entre la condición de estar vivo y el temor a lo incierto.

La colección que se muestra en el Museo Amparo integra una pieza hecha ex profeso titulada 27 de septiembre de 2010, que semeja a una telaraña con muñecos de plástico de lucha libre.

Esta obra es resultado de asistir a una función de lucha libre el pasado lunes. Me fascina el amor de los mexicanos por la lucha y solicité que me compraran unos muñecos para realizar la instalación.

También será presentada en la próxima exposición de Annette Messager, en el Antiguo Colegio de San Ildefonso, en 2011.

–Su trabajo es muy intimista, ¿qué tanto involucra sus emociones en cada pieza?

–No sé si tengo emociones al crear, porque debo ser neutra. Más bien, están presentes a la hora de planear cada pieza, pero en el momento que toma forma prefiero ser más receptiva y dejar de lado los sentimientos.

–Entonces, ¿qué le conmueve cuando ve su obra terminada?

–Creo que el arte conmueve, pero cuando estoy muy lejos de casa, en un país con una cultura y una lengua muy diferentes, como ahora, me emociona ver cómo la gente se identifica con mi obra, más que si un coleccionista la comprara. Eso sí que es maravilloso.

(Este sábado, a las 12 horas, se inaugura Rumores y concluirá el 10 de enero de 2011. Entrada gratuita. El Museo Amparo se ubica en la calle 2 Sur 708, en el Centro Histórico de Puebla.)