De 2008 a la fecha, más de 100 alcaldes, regidores y otros funcionarios municipales han sido amenazados, agredidos, secuestrados o asesinados por el crimen organizado y lamentablemente habrá más muertos porque están en la indefensión, sostuvo Ramón Galindo, senador del Partido Acción Nacional (PAN).

El presidente de la Comisión de Desarrollo Municipal del Senado señaló que la cifra debe ser mayor, pero muchos ediles no se atreven a denunciar la presiones y chantajes de la delincuencia por temor a ser asesinados. “Las cifras hablan por sí solas, 10 alcaldes han sido ejecutados en lo que va del año e incluso hay desaparecidos”.

Recordó que en septiembre de 2008 Edgardo Buscaglia, investigador del Instituto Tecnológico Autónomo de México y de la Universidad de Columbia, Nueva York, presentó un estudio donde sostiene que más de 63 por ciento de las 2 mil 441 presidencias municipales del país están infiltradas por el narcotráfico y de éstas, 8 por ciento están totalmente bajo su control.

El documento precisa que hasta 2009, Chihuahua era la entidad con mayor número de funcionarios ejecutados de los tres niveles de gobierno. Entre 2008 y 2009 se perpetraron 61 homicidios, entre ellos de alcaldes y ex alcaldes, directores de policía, regidores y un marshal de Estados Unidos.

Se alude a amenazas de muerte recibidas en ese periodo por presidentes municipales que no cumplieron con peticiones de narcotraficantes, entre otras que se les permitiera usar la policía municipal.

Igualmente se resalta que en las elecciones de julio de 2009, el PAN no registró candidaturas en siete municipios rurales de Nuevo León donde la violencia y la inseguridad por el narcotráfico van al alza.

Ex presidente municipal de Ciudad Juárez, consideró que esa cifra de 63 por ciento puede incluso haberse elevado, ya que la delincuencia opera con total impunidad y deteriora las estructuras municipales. A los alcaldes que no ceden a las presiones, los asesinan y por ello muchos ediles también se ven obligados a pagar cuotas a pandillas y bandas criminales.

“Tristemente, los atentados y las ejecuciones continuarán, porque no hay manera de que las autoridades municipales se puedan defender y el mensaje a la ciudadanía es desalentador: si no pueden ellos mismos protegerse, menos van a brindar seguridad a la ciudadanía.”

Ello explica, dijo, que la población de Ascención, en Chihuahua, haya tomado la justicia en sus manos para defenderse de los delincuentes. Si falla la política, subsidiariamente los ciudadanos toman el control, con todo lo que ello implica.

Galindo dijo estar muy angustiado por la situación en la mayoría de las alcaldías del país. Hay que tomar acciones inmediatas, tanto legislativas como de gobierno, porque las autoridades municipales están solas, completamente abandonadas por el poder público.