La emoción previa a una contienda de título mundial se notó ayer en la actitud de Jhonny González, quien cerró su preparación con una rutina de resistencia en el gimnasio Romanza, en víspera de la contienda que sostendrá el 15 de este mes en Las Vegas, ante el ghanés Jackson Asiku, por la corona pluma de la Organización Internacional de Boxeo.

Será una contienda muy difícil, pero voy muy bien preparado para saber qué estrategia aplicar. Los africanos son muy duros, resistentes y se meten de lleno en las peleas, por lo que, explica, espera dedicar cuando mucho los primeros dos episodios para descifrar lo que trae, y entonces saber qué tipo de boxeo debo hacer para ganar.

González asegura que su padre Miguel Ángel Ratón González “me enseñó todo lo que sé de boxeo, pero ahora Nacho (Beristáin) me ha corregido cosas, como mantener la guardia en alto, mover más la cintura, pero además me llevó a recuperar la confianza de que esto es lo mío y estoy seguro de regresar con la victoria”.

Terminada la colocación de las vendas en las manos del ex monarca, reiteró: ahora sé que este don del boxeo lo he recuperado y a pocos días de la pelea de campeonato me siento muy motivado, seguro, listo para enfrentar con éxito a quien sea, comentó.

Luego de recoger su visa en la embajada estadunidense, Jhonny acudió a su práctica final, donde expuso que para Asiku será la primera contienda fuera de su país, así es que querrá mostrarse muy bien, aunque finalmente Las Vegas es un lugar que impone, y por ese lado el mexicano espera tener la ventaja de conocer la sede y festejar la fecha patria mexicana con una victoria.

Durante los rounds de sombra y de boxeo que realizó Jhonny, Beristáin comentó que va muy bien. No tiene problemas ni con la técnica ni con la confianza. Está a tope en lo mental, y va a dar un buen espectáculo. Está tirando muy buenas combinaciones de golpes; rectos y ganchos sólidos. Ya está listo. Seguro regresamos con otro campeonato, sentenció.

Por la mañana, la campeona supermosca del Consejo Mundial de Boxeo, Ana María La Guerrera Torres, se vistió de enfermera. Con tapabocas, gorro y bata azul llevó un poco de alegría a los menores del Hospital Pediátrico de Tacubaya, a quienes obsequió juguetes y playeras autografiadas y se dejó fotografiar por varias de las mamás de los pacientes.

Tras recorrer los pabellones del nosocomio, la monarca, quien expondrá su cinturón verde-oro este fin de semana en la Plaza de Toros México ante la alemana Alesia Graf, aseguró: siempre me fortalece hacer este tipo de visitas, porque, por un lado, traemos un poquito de alegría a los niños y, por otro, me ayuda a valorar lo afortunados que somos con la vida que nos ha tocado vivir.