Contepec, Mich., 27 de agosto. El grupo parlamentario del PRD en el Senado concluyó su octava reunión plenaria con un llamado al PRI a que asuma su responsabilidad, ya que puede crear parálisis legislativa si insiste en imponer de forma autoritaria su mayoría en la Cámara de Diputados.

Los senadores perredistas advirtieron que los priístas no pueden actuar legislativamente como si ya hubieran ganado la elección presidencial de 2012 y tuvieran el control de ambas cámaras. Se criticó también la actuación del presidente Felipe Calderón.

El coordinador de la bancada, Carlos Navarrete, advirtió que el Ejecutivo ha perdido la paciencia en temas fundamentales y se le advierte cierta desesperación, sobre todo cuando se refiere con molestia a las críticas a su gestión. Hay agotamiento en la capacidad de Calderón de escuchar y corregir errores, y eso va a traer consecuencias en el ámbito político.

Navarrete consideró que hay señales ominosas que alertan sobre lo difícil que va a ser tomar acuerdos en el periodo de sesiones que comienza el próximo primero de septiembre, como la pretensión del PRI de forzar acuerdos en la Cámara de Diputados, sabiendo que en el Senado eso no tendría viabilidad.

Insistió en que tanto el gobierno como el PAN deben entender que el sexenio aún no termina y el Congreso no puede quedarse empantanado por disputas poselectorales o previas a los comicios presidenciales de 2012.

Acompañado por los senadores Silvano Aureoles y Arturo Núñez, Navarrete dio a conocer la agenda de su bancada, en la que incluyen una reforma electoral y modificaciones a las leyes Federal de Telecomunicaciones y del Seguro Social. En este último caso –dijo–, los perredistas van a impulsar modificaciones al marco jurídico del IMSS para mantener a salvo el derecho a la jubilación, luego de la reciente jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

El cambio establecerá de manera clara en la Ley del Seguro Social que el tope para fijar las pensiones será de 25 salarios mínimos, no de 10, que fue el parámetro fijado por la Corte.

Detalló que otra propuesta de reforma a dicha legislación que van a presentar es para acabar también con la controversia en torno a los derechos de los cónyuges en parejas del mismo sexo.

Navarrete señaló que también acordaron no avalar ningún aumento de impuestos, y que se alegran de que el PRI se haya arrepentido y esté en disposición de bajar el impuesto al valor agregado, que el año pasado decidió incrementar. Seguramente les entró crisis de conciencia y ahora quieren corregir.

En la agenda de los senadores del PRD no figura la reforma laboral, ya que consideran que es poco viable aprobar un cambio a la Ley Federal del Trabajo, debido a las propuestas tan dispares que tienen el PAN y el PRI en esa materia.

Después del debate sobre la agenda legislativa, los senadores discutieron un punto que parecía no crear mayor conflicto, pero cuando Navarrete hizo la propuesta de los perredistas que se integrarán a la mesa directiva del Senado, de inmediato hubo protestas.

El motivo es que sugirió a Antonio Mejía Haro como secretario de la mesa directiva. Se trata del candidato perdedor de la gubernatura de Zacatecas, integrante de la corriente de Amalia García; a algunos de los legisladores, entre ellos al también zacatecano Tomás Torres, no les pareció la propuesta.

No hubo acuerdo y a propuesta de Torres se decidió posponer la discusión para otra reunión, en la que estén presentes todos los integrantes de la bancada, ya que ayer faltaban siete.