La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGDF) tiene ya los retratos hablados de las personas que irrumpieron en el bar Bengala la madrugada del viernes para asesinar al abogado y empresario Óscar Paredes Echegaray, quien era testigo en el proceso penal que se sigue a la banda de secuestradores de La Flor.

Asimismo, concluyó la declaración ministerial de los 11 testigos, entre empleados, clientes y el propietario del establecimiento, pero deberán continuar colaborando en la investigación para, por ejemplo, ampliar sus declaraciones o alguna otra diligencia que ordene el Ministerio Público (MP).

Mientras, el bar, ubicado en la calle Sonora, colonia Roma, donde se encontraron 25 cartuchos percutidos, continúa asegurado hasta que concluyan las diligencias ministeriales, y en su caso, aclaró la PGJDF, será la delegación Cuauhtémoc la que determine si el negocio violó alguna norma administrativa.

Al informar sobre el curso de la investigación, la dependencia precisó que con base en los testimonios de los testigos, sólo uno de los dos sujetos que entraron de manera violenta al bar disparó contra el abogado con una metralleta, y quien recibió al menos 16 impactos en cráneo, cara, cuello y tórax, y que al momento del ataque se encontraba en la barra conversando con el disc jockey.

El agresor fue descrito como un tipo robusto, de entre 35 a 40 años, 1.80 metros de alto, moreno, cabello corto oscuro, que vestía chamarra o gabardina negra de la cual sacó el arma. De su acompañante se dijo que es delgado, de aproximadamente 1.70 metros y moreno.

La PGJDF también aclaró que en el lugar había entre 20 y 25 clientes, de los cuales resultaron heridos el empresario Mariano Martínez Mendoza y su escolta José Antonio Campos Campos, quienes se encuentran en el hospital ABC de Santa Fe, luego de ser atendidos inicialmente en el Español. Mientras que el otro herido fue identificado como José Ángel Castañeda Argüelles, quien se encuentra en el hospital Durango. Todos fueron reportados fuera de peligro.

El agresor llegó en un auto Chevy Monsa color gris, acompañado de dos sujetos más, y una vez consumados los hechos los tres hombres caminaron sobre la calle de Puebla y luego abordaron un vehículo, no se sabe si el mismo en el que arribaron al lugar, seguidos de una motocicleta deportiva.

Por otra parte, el abogado de la ex agente federal Lorena González, una de las presuntas integrantes de La Flor, Rodrigo Higuera, aseguró que la muerte del abogado y empresario no beneficia en nada a ninguno de los procesados, por lo que consideró poco probable que el homicidio esté relacionado con dicho juicio, pues la declaración del abogado se encuentra en el expediente del caso desde hace varios meses.

En cambio, dijo, sí podría perjudicar a la defensa de los acusados, pues luego de lo sucedido es muy probable que ni su hijo, secuestrado en 2008 presuntamente por La Flor, ni su escolta Filadelfo González, acudan a la audiencia programada para el próximo 26 de agosto, a la que también estaba citado Paredes Echegaray.