Como la seguridad, la educación es un bien público global por el que se debe apostar, asevera
Urge frenar presiones de la Iglesia, señala ex presidenta de la Academia Mexicana de Ciencias
Sábado 21 de agosto de 2010, p. 11
La administración de un Estado no puede ser monotemática, pues en caso de serlo el resto de los retos y problemáticas del país se rezagarían, sostuvo Juan Ramón de la Fuente, ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Entrevistado tras su participación en el ciclo de mesas 2010: Reforma del Estado y Fortalecimiento de la Nación, que ayer tocó el tema de cultura y sociedad del conocimiento, De la Fuente aseguró que para solucionar la actual crisis que enfrenta México es necesario poner de relieve lo que le importa a la gente, por sobre lo que le interesa a los políticos.
Esa es la diferencia entre tener una agenda monotemática o una que corresponda a un Estado en transición, complejo, con presiones económicas, políticas, sociales y de seguridad. Esa es la trama en la que está inmerso el país, pero no se puede resolver sólo atendiendo una de las necesidades (la inseguridad).
Indicó que la violencia e inseguridad en el país necesitan soluciones integrales, pues mientras la ciudadanía no tenga trabajo, un ingreso y desarrollo y no se apoye la educación y a los jóvenes, el problema no se resolverá.
Rezago en Latinoamérica
Durante su ponencia en el foro –organizado por la Asociación para la Reforma del Estado con el apoyo de la UNAM–, el también presidente de la Asociación Internacional de Universidades destacó la importancia del conocimiento y la ciencia como motores para el desarrollo de las naciones. Sin embargo, abundó, el acceso a la educación en algunos países, entre ellos México, no es equitativo.
“El porcentaje de población en la educación superior en Estados Unidos y Europa occidental es de 60 a 70 por ciento; en el norte de Europa tienen coberturas que rebasan 80 por ciento; y en América Latina y el Caribe, entre 20 y 30 por ciento.
Pero los más pobres, sobre todo en América Latina, están totalmente rezagados, las posibilidades de ingresar a la educación superior son mucho mayores para quienes tienen más recursos que para los pobres.
Con base en estadísticas de la asociación que preside, señaló que la población mundial en nivel superior ha crecido en 20 años, aunque los alumnos siguen siendo muy pocos
.
En 1991 había en el planeta 68 millones de estudiantes en este nivel, 132 para 2004 y este año la cifra es de 150 millones.
De ese total, China tiene 28 millones, Estados Unidos 17.5 y México sólo 2.6 millones.
Consideró que al igual que la seguridad pública mundial y la protección del medio ambiente, la educación es un bien público global, por lo que se debe apostar a ella.
En su turno, Olac Fuentes Molinar, ex subsecretario de Educación Básica, dijo que se debe impulsar el proceso de formación científica desde la infancia.
Agregó que los científicos de renombre, en todas las áreas del conocimiento, deben recordar la relevancia de impartir cátedra, y no sólo enfocarse a la investigación, publicación y generación de patentes. Si no tenemos una revaluación de la docencia, la investigación en el país se irá reduciendo
, apuntó.
Sostuvo que en el único nivel en el que México está a la par de otros países es en el básico, cuya cobertura alcanza 98 por ciento.
Sin embargo, al avanzar a otros niveles, la cifra va en descenso, de ahí que la posibilidad de un sistema de educación superior de altas dimensiones sea inviable desde hace varios años.
Rosaura Ruiz, ex presidenta de la Academia Mexicana de Ciencias, subrayó que es urgente impedir que la Iglesia continúe presionando en la agenda política nacional, pues se debe legislar y decidir políticas de Estado con base en criterios científicos, y no en creencias.