El presidente Felipe Calderón Hinojosa tiene la obligación constitucional y ética de acudir a la apertura del periodo de sesiones en las cámaras del Congreso de la Unión, refirió Porfirio Muñoz Ledo, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores en la Cámara de Diputados.

Es una obligación universal que el jefe de Estado abra el periodo de sesiones en las cámaras, no hay ningún lugar en el mundo donde no pase; ésta es una de las grandes estupideces de la transición mexicana, simplemente porque son presidentes ilegítimos y no se atreven a enfrentar al Congreso, dijo.

El legislador petista opinó que las inasistencias del Presidente significan la ruptura de la relación formal entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, y señaló que esa situación es resultado de una profunda incultura constitucional: La entrada de Calderón al poder fue con calzador. Este es un gobierno que tiene ilegitimidad de origen. Y que no venga al Congreso a la apertura del periodo de sesiones es una anomalía política que da cuenta de las carencias de las instituciones.

A su vez, el diputado Mauricio Toledo, del PRD, dijo que Calderón tiene la responsabilidad ética y política de presentarse ante la máxima soberanía del país a explicar por qué ha conducido a la República a un estado de desorden y crisis que no tiene precedente.