Washington, 4 de agosto. El cardenal cubano Jaime Ortega, quien lideró un fructífero diálogo con el gobierno de su país que llevó a la liberación de decenas de opositores presos, se reunió este miércoles en Washington con el asesor de Seguridad Nacional del presidente estadunidense Barack Obama, Jim Jones, informó un portavoz de la Casa Blanca.

El funcionario le expresó al cardenal el deseo de Estados Unidos de ver a todos los prisioneros políticos liberados sin condiciones en Cuba, indicó el portavoz Mike Hammer.

El asesor del mandatario de Estados Unidos elogió al cardenal Ortega por el papel de la Iglesia católica cubana en asegurar la liberación de los presos y defender los derechos básicos de los cubanos, dijo Hammer.

Ortega, que recibió un premio de una organización católica en la capital estadunidense, lideró el diálogo iniciado en mayo con el gobierno del presidente Raúl Castro, que culminó con el anuncio de la liberación progresiva de 52 presos políticos, una veintena de los cuales ya fueron excarcelados y viajaron a España.

Jones también le expresó al cardenal el llamado de Washington a la liberación inmediata de Alan Gross, un contratista estadunidense detenido en la isla desde diciembre, al que el gobierno cubano acusa de delitos graves al servicio de la política subversiva de Estados Unidos.

Posteriormente, Ortega se reunió con el secretario adjunto de Estado para Asuntos Hemisféricos, Arturo Valenzuela, en la sede diplomática del Vaticano en la capital estadunidense.

La conversación de más de una hora fue muy grata y provechosa y se enfocó en el tema de la liberación de los opositores presos y del contratista Gross, dijo Valenzuela a los periodistas después de la reunión.

El pasado martes, al recibir el premio Gaudium et Spes de la católica orden de los Caballeros de Colón, el cardenal Ortega hizo votos para que el proceso de diálogo con el gobierno de Raúl Castro culmine exitosamente.

Por último, en Santiago, la prensa chilena informó de la llegada del ex preso cubano José Ubaldo Izquierdo, junto con su familia. Arribó procedente de España, a donde viajó después de su liberación el pasado 22 de julio.