Caracas, 1º de agosto. El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, afirmó que el objetivo supremo de su gobierno es detener la locura guerrerista de su par colombiano, Álvaro Uribe, e impedir que su gobierno, ya de salida, perpetre su último crimen: arrastrar a un conflicto bélico a dos pueblos que se saben hermanos.

En su columna dominical de prensa, Las líneas de Chávez, el mandatario sostuvo que su gobierno reivindica para el pueblo colombiano el mismo derecho que para el pueblo venezolano y para todos los pueblos de América: el derecho de vivir en paz.

Chávez, que el viernes desplegó unidades terrestres y aéreas de defensa en la frontera con Colombia ante la amenaza de una eventual agresión, subrayó que el camino para lograr la tranquilidad y la estabilidad en América Latina está entre llevar a la mesa de diálogo de los pueblos del sur el ejercicio voluntarioso por la paz o mantener en la región un ambiente de confrontación con una elevada peligrosidad bélica.

El conflicto colombiano-venezolano se encuentra de hecho en el centro de la discusión en la Organización de Estados Americanos y la Unión de Naciones Sudamericanas.

La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega, consideró carentes de valor jurídico las acusaciones presentadas por Colombia ante al OEA, la semana antepasada, sobre supuestos campamentos de guerrilleros colombianos en el país vecino.

Ortega dijo que el único valor de los elementos esgrimidos por el gobierno de Uribe es mediático, porque tiene el objetivo de crear a nivel internacional una matriz de opinión contra Venezuela.