Evacuan a trabajadores de los periódicos El Norte y El Mexicano
Sábado 31 de julio de 2010, p. 8
Chihuahua, Chih., 30 de julio. El Ejército y la policía fueron puestos en alerta máxima ante amenazas de nuevos atentados con explosivos, que este viernes incluyeron a los periódicos El Norte y El Mexicano, de Ciudad Juárez, al concluir el plazo fijado por los atacantes que la noche del pasado día 15 hicieron estallar un coche bomba.
Antes de las 10 de la mañana los dos medios fueron avisados de que les colocarían artefactos explosivos, y tras el inmediato desalojo de los trabajadores llegaron militares y policías federales para revisar las instalaciones.
En la ciudad fronteriza se reportaron pintas con amenazas de que se iban a colocar coches bomba, al cumplirse el plazo de 15 días dado por los pistoleros del cártel de Juárez para que se investigue la supuesta protección del gobierno federal a la banda de Joaquín El Chapo Guzmán.
En una barda de la colonia 16 de Septiembre hubo una pinta, en la cual, supuestamente, La Línea instó a cuidarse a “todos los que cubren al Chapo”, incluida la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos.
El gobernador José Reyes Baeza dio a conocer que se extremó la vigilancia y se intensificaron las tareas de detección de explosivos en calles de la localidad fronteriza.
Además ofreció al gobierno de Estados Unidos todo el apoyo para garantizar la seguridad de los empleados de su consulado en Ciudad Juárez, que cerró este viernes y así permanecerá hasta complementarse una revisión de seguridad
, anunció un día antes la embajada estadunidense en México.
Reyes Baeza indicó que, como parte de los acuerdos binacionales, el Ejército mexicano y la Policía Federal vigilan el consulado y reciben apoyo del Departamento de Seguridad Interna, la FBI y la Administración Antidrogas de Estados Unidos, con el fin de prevenir otro atentado.
A su vez, Eduardo Rodríguez, delegado en Ciudad Juárez de la Secretaría de Relaciones Exteriores, manifestó que se optó por cerrar la legación estadunidense tras la amenaza de un coche bomba. El personal fue desalojado el jueves por la mañana y luego se decidió suspender actividades de manera indefinida
, sostuvo.
La situación se tornó delicada y es considerada de alto riesgo
, subrayó el delegado, mientras Carlos Silveyra, representante del gobernador en la localidad fronteriza, comentó que la gente vive una sicosis por las amenazas de bomba
.