Autoridades de Estados Unidos redujeron la clasificación de México de categoría uno a dos en los elementos administrativos y organizacionales de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), por carecer del número suficiente de inspectores de vuelo, informó la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).

El subsecretario Humberto Treviño aseguró que las líneas aéreas nacionales son seguras y seguirán operando con normalidad. Explicó que se tenían 14 pilotos que son inspectores de vuelo y se espera capacitar a otros 20 en las próximas cuatro semanas con lo que se podría cubrir sobradamente el déficit.

Por otro lado, el funcionario descartó que Mexicana de Aviación se pueda declarar en quiebra. Ahorita lo que vemos es que están ellos (Mexicana) en una restructuración financiera que están compartiendo con sus proveedores y su sindicato de tal manera que esta colaboración de autoridades, empresa, sindicato y proveedores nos señala la posibilidad de que esto pueda ser resuelto, pero habrá que esperar en los próximos días que esto se concluya.

Sin duda, dijo, tenemos que estar en observación de las condiciones por las que transita la empresa. Destacó que la flota de la aerolínea Mexicana se ha renovado con aviones de modelos muy recientes, las operaciones de Mexicana tienen gran calidad y no se corre ningún riesgo de seguridad.

Explicó que la situación financiera de la empresa no se asocia con una condición de riesgo o de seguridad de la compañía. Creemos que esto se va a resolver a corto plazo y la solución es inminente, porque incluso no tiene grandes adeudos de combustible. Mexicana tiene un programa viable.

En caso de que algunos pasajeros resultaran afectados, como fue en el caso de Canadá, que retuvo dos aviones, se buscará que otras aerolíneas con las que se tienen acuerdos, esos pasajeros puedan ser atendidos.

La embajada de Estados Unidos en México confirmó que la Administración Federal de Aviones de Estados Unidos (FAA, por siglas inglés) decidió cambiar la calificación de México a categoría dos, con lo cual las aerolíneas mexicanas no pueden aumentar su flota y nuevos destinos al país vecino. La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos señaló que hay deficiencias en la capacidad de supervisión aérea en México, ante la falta de inspectores.

Estamos trabajando de la mano con la FAA en la administración de una estrategia de acciones correctivas sumamente efectivas y eficaces cuyos frutos ya los tenemos a la vista. Únicamente debemos resolver un tema de contrataciones de personal en el área de inspectores de vuelo.

El subsecretario Treviño Landois precisó que se tenían nueve inspectores de vuelo en la DGAC y se aumentó a 14, pero se requieren al menos otros 20 pilotos, los cuales pueden ser capacitados en las próximas cuatro semanas. Indicó que de las auditorías practicadas 95 por ciento de las observaciones están resueltas.

Detalló que la decisión de bajar la categoría fue tomada tras la visita de supervisión que realizó a la FAA a la DGAC en los meses de enero y julio de este año.

La medida de la FAA no significa un deterioro en la seguridad de la aviación civil en México. Las aerolíneas nacionales son seguras y seguirán con servicios de alta calidad, equiparables con los mejores estándares internacionales, aseguró el funcionario

Las operaciones con Estados Unidos se desarrollarán con absoluta normalidad, sin variaciones en la frecuencia, rutas o destinos, señaló la SCT en un comunicado.

Estados Unidos tiene implementado un mecanismo de evaluación y prácticas recomendadas para las aerolíneas y su mantenimiento, donde coloca en categoría uno a las que cumplen con estas exigencias, y categoría dos se da a un Estado o país que incumple con las mencionadas prácticas.

La FAA evalúa el marco legal de la aviación civil y cuestiones relativas a la capacidad de supervisión, entrenamiento de personal y procesos de inspección dentro de la normalidad que emite la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), agencia de la Organización de Naciones Unidas (ONU).

Aeropuerto de Toluca, estado de MéxicoFoto MVT/Mario Vázquez de la Torre

Humberto Treviño afirmó que el problema que enfrenta la SCT es de cantidad, no de calidad. La DGAC cuenta con inspectores altamente capacitados que realizan su trabajo con profesionalismo y eficacia, teniendo como objetivo principal garantizar la seguridad del transporte aéreo en México.

Según la SCT la medida de la FAA no significa un deterioro en la seguridad de la aviación civil en México. Las aerolíneas nacionales son seguras y seguirán con servicios de alta calidad, equiparables con los mejores estándares internacionales.

Para solventar esto, la SCT trabaja en una estrategia integral a fin de superar esta situación coyuntural y recuperar, a la brevedad, la categoría uno y la permanencia de México en esta clasificación.

El subsecretario Treviño Landois reconoció que esta medida afecta la imagen de México pero dijo que las operaciones con Estados Unidos se desarrollarán con absoluta normalidad, sin variaciones en la frecuencia, rutas y destinos.

Sin contacto

Mexicana de Aviación entregó este viernes sus balances financieros a las organizaciones sindicales de pilotos y sobrecargos, en los que puede confirmarse la delicada situación económica en la que se encuentra, y que servirán de base para decidir si la compañía es rescatada por sus trabajadores y algún grupo de inversionistas, o si es vendida en una subasta comercial.

Hasta hoy no hemos tenido contacto con la empresa, con excepción de algunas llamadas. Me acaban de entregar sus estados financieros y aunque no soy especialista, veo que la situación no es buena, afirmó en entrevista con La Jornada la secretaria general de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación de México (ASSA), Lizette Clavel.

En caso de que se confirmara la quiebra de la aerolínea –lo que podría ocurrir la próxima semana, antes del 9 de agosto, según algunas versiones–, los trabajadores estarían dispuestos a escuchar ofertas de inversionistas privados o incluso del gobierno federal, si se presentara el caso.

Aunque hasta el momento la empresa no les ha dicho el monto exacto de la deuda, tanto los pilotos como los sobrecargos estarían dispuestos a analizar propuestas viables de rescate.

No nos negamos a cuantificar y a ver qué hacer, pero también queremos que nos garanticen que haya certidumbre de que Mexicana va a durar no cinco o 10 años más, sino otros 89, señaló Clavel.

Faltó inteligencia

La situación de la compañía llegó hasta este punto, en opinión de la dirigente sindical, porque faltó un plan inteligente de inversión por parte de los empresarios.

“Para que compraran la aerolínea, los trabajadores nos ‘pusimos guapos’, redujimos nuestro contrato colectivo y hasta perdimos algunos derechos de jubilación. El apoyo de nosotros lo han tenido siempre, pero no han encontrado la sinergia” que saque adelante a la empresa, señaló.

Si bien la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) ha manifestado su voluntad de establecer una política aeronáutica adecuada, lo que incluiría la creación de una aerolínea bandera que surja de unir a Mexicana y a Aeroméxico, en el pasado también ha sido un poco omisa, lo cual contribuyó a hacer más grande el actual problema.

Hasta en un esquema de libre comercio, dijo, tiene que haber una regulación estatal adecuada que le dé condiciones de igualdad a todas las empresas. Si esto no sucede en México, podría haber una distorsión del mercado para llegar a tener solamente aerolíneas de bajo costo, lo cual empeoraría la calidad de la aviación nacional.

Los pilotos deberán decidir en asamblea, entre el sábado y el domingo, cuál es su decisión frente a las propuestas de la empresa, lo mismo que los sobrecargos, que se reunirán el próximo lunes. (Fernando Camacho Servín)