Santiago, 19 de julio. El jugador paraguayo José Pedrozo, del equipo Rangers, intentó estrangular al árbitro durante un partido contra el Deportes Concepción de la segunda división chilena cuando vio que iba a ser expulsado por una infracción castigada con la segunda tarjeta amarilla.

El ambiente ya estaba caldeado: pocos minutos antes, el árbitro, Marcelo Miranda, obligó a repetir cuatro veces la ejecución de un penal en favor de Deportes Concepción, que en ese momento ganaba 1-0.

En el primer cobro de penal, Patricio Almendra marcó el tanto, pero el silbante lo anuló por invasión del área. Repitió Almendra y falló, pero el árbitro aseguró que el portero se había adelantado.

En la tercera instancia, el colombiano Hamilton Ricard disparó y el guardameta tapó, pero Miranda lo anuló de nuevo por invasión al área. Finalmente Ricard marcó en el cuarto lanzamiento, validado por el juez.

Pocos minutos después, el paraguayo Pedrozo cometió una falta grave y cuando el árbitro se acercó a expulsarlo, el jugador, muy enervado, se lanzó contra él, rodeó su cuello con las dos manos y lo zarandeó con fuerza.

Tras la agresión, los jugadores de Rangers trataron de calmar a su compañero, quien trató de correr de nuevo hacia el juez. Luego de ser controlado, la policía entró en la cancha y se lo llevó. Rangers cayó 3-0 en el estadio Municipal de Collao.

Pedrozo declaró que regresará a su país y que no está nada arrepentido. Me sentí perseguido por el árbitro y cometí un grave error, pero ya está hecho, dijo.