Senadores de PRI, PRD y PT deploraron que el nuevo secretario de Gobernación, Francisco Blake, insista en una política contra el crimen organizado que no ha funcionado. Hay signos ominosos, como el atentado con coche bomba en Ciudad Juárez y el secuestro de Diego Fernández de Cevallos, que hablan de una situación de violencia e inseguridad extrema, que recuerda a la Colombia de hace 20 años, advirtió el priísta Carlos Jiménez Macías.

Igualmente, el petista Ricardo Monreal advirtió que el bajo perfil del nuevo responsable de la política interior del país y su insistencia en una estrategia fallida son preocupantes, ya que es obvio que la violencia seguirá escalando. A su vez, el perredista michoacano Jesús Garibay dijo que es lamentable que el funcionario anuncie más balas y bayonetas.

Si Blake Mora no entiende que la forma en que desde Los Pinos decidieron enfrentar el narcotráfico y otras bandas criminales ya probó su ineficacia, va a a fracasar también como secretario de Gobernación, insistió Jiménez Macías.

No deja de ser desalentador que el Ejecutivo haya nombrado para ocupar el segundo puesto más importante del país a alguien sin experiencia para enfrentar el enorme desafío para el país que es la inseguridad.

El senador del PT Ricardo Monreal aludió también al bajo perfil del nuevo titular de Gobernación, sobre todo por su poca experiencia en materia de política nacional y por el triste desempeño que tuvo como subsecretario de Gobierno de Baja California durante el terremoto que afectó a Mexicali.

A su juicio, el único mérito de Blake Mora es ser amigo de Felipe Calderón, y por ello llega a Gobernación para defender la misma estrategia anticrimen que no ha dado resultados, aunque desde el gobierno federal la traten de maquillar.

Por separado, la secretaria general del PRD, Hortensia Aragón, señaló que su partido está en espera de que Blake Mora concrete el llamado al diálogo que formuló el presidente Felipe Calderón, a fin de estructurar la política en materia de inseguridad y combate al narcotráfico, para dar fin a esa errónea lucha que ha costado alrededor de 25 mil muertos en lo que va del sexenio.

De entrada, detalló, el PRD insistirá en cortar de tajo los hilos financieros del negocio millonario que representa el narcotráfico, ya que mientras no se pongan en marcha medidas para acabar con el lavado de dinero y haya una estricta fiscalización de los fondos de dudosa procedencia, no se podrá hablar de avances reales contra los barones de la droga.

La dirigente perredista resaltó que confía en que las pláticas recientes de gobernadores electos con Calderón en Los Pinos no hayan sido de mero protocolo, sino para que ambas partes conocieran de primera mano la problemática sobre criminalidad, sobre todo en aquellas entidades donde la violencia ha rebasado ya los límites.