Johannesburgo, 3 de julio. El atacante uruguayo Luis Suárez, expulsado por rechazar con la mano sobre la línea de meta un cabezazo con destino de gol en el duelo de cuartos del Mundial ante Ghana, fue suspendido un solo partido, mientras Nicolás Lodeiro se perderá los dos últimos encuentros, afectado por una lesión, y el capitán Diego Lugano es tratado entre algodones por un esquince del ligamento interno de la rodilla derecha.

Suárez cumplirá la fecha de castigo en semifinales contra Holanda, el próximo martes en Ciudad del Cabo, pero después estará habilitado para alinear en el último encuentro de la celeste en el torneo, ya sea la final o el duelo por el tercer puesto.

La comisión disciplinaria no agravó la suspensión automática de un partido que reciben todos los jugadores que ven la tarjeta roja durante el Mundial.

El delantero del Ajax de Amsterdam detuvo con la mano un cabezazo de gol en el último minuto de la prolongación ante Ghana, por lo que el árbitro lo expulsó, como indica el reglamento, aunque el artillero y figura charrúa es ahora el héroe para los suyos, pues Asamoah Gyan estrelló el penal en el travesaño y en la serie definitoria la celeste ganó.

Luis Suárez salió como héroe por impedir con la mano el gol de GhanaFoto Reuters

En la delegación charrúa se habían disparado todas las alarmas ante la posibilidad de que la FIFA decidiera castigar con más partidos a Suárez por su roja directa, pero quedó en una sanción regular tras la pesquisa cotidiana del máximo organismo del balompié.

Era la circunstancia del momento. No me quedaba otra situación y la mano de Dios la tengo yo ahora, dijo Suárez, acuñando la expresión usada por el argentino Diego Maradona sobre su primer gol en la victoria ante Inglaterra en México 1986.

Al margen de las ausencias en su plantel, el técnico Óscar Tabárez se mostró convencido de que el partido ante la naranja mecánica será dificilísimo, aunque no imposible de ganar.

Es una versión un poco diferente de lo que es tradicional en Holanda, es un equipo muy equilibrado, será difícil pero no imposible, añadió el seleccionador de Uruguay a los medios durante un entrenamiento con los suplentes del equipo en la Universidad de Johannesburgo.

Tabárez, que el viernes frente a Ghana logró la gesta de meter a Uruguay en semifinales por primera vez desde 1970, podría seguir haciendo historia si el martes vence a Holanda.