Afectará a más de mil millones de personas que ya están desnutridas
Prevén incrementos de precios de más de 40% en los comestibles
Miércoles 16 de junio de 2010, p. 30
La Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) anticiparon un aumento del hambre en el mundo, con efectos sobre más de mil millones de seres humanos para la próxima década a causa de previsibles aumentos hasta de 40 por ciento, en términos reales, en el precio de los alimentos.
Ambos organismos internacionales lanzaron la alerta en la presentación del informe Perspectivas agrícolas OCDE-FAO 2010-2019 durante una conferencia en Roma transmitida en todo el mundo a través de la red de Internet.
Sobre el pronosticado aumento de precios en los próximos años, ambos organismos lo atribuyen a la continua expansión de la producción de biocombustibles, derivada a menudo para cumplir los objetivos fijados por los gobiernos, que supondrá también una demanda adicional de trigo, cereales secundarios, aceites vegetales y azúcar. Además, añade, el aumento de los costos de producción constituye una presión adicional para el alza de precios, en particular en los sectores que requieren un uso intensivo de energía.
En la presentación del informe se diagnosticó que será necesario aumentar la producción y productividad agrícolas, establecer un sistema comercial reglamentado que funcione correctamente para regular la competencia, y garantizar que los alimentos puedan llegar desde las zonas productoras con excedentes a los centros de consumo deficitarios.
José Ángel Gurría, secretario general de la OCDE, propuso aplicar contratos de producción, sistemas de seguros agrícolas y mercados de futuros para garantizar que los campesinos cuenten con herramientas para hacer frente a los riesgos futuros. Por el momento, dijo, el sector agrícola mundial ha mostrado su capacidad de resistencia a los recientes vaivenes de precios y la crisis económica y, en conjunto, las perspectivas para este año son moderadamente
más positivas que en años recientes.
La aseveración de Gurría se fundamenta en el planteamiento del reporte sobre la agricultura mundial, donde los organismos internacionales afirman que hasta este año el crecimiento económico sostenido en los mercados emergentes es un factor importante que apuntala una demanda creciente y precios más altos.
Sin embargo, se calcula que en los próximos años los precios reales de los aceites vegetales sean 40 por ciento más altos, mientras el de los lácteos aumentarán entre 16 y 45 por ciento. Si los precios alimentarios continúan altos de forma sostenida, seguirán afectando negativamente a la seguridad alimentaria, en especial entre la población pobre que destina una parte importante de sus ingresos a comprar alimentos
, y tendrá repercusiones entre una población mayor a los cerca de mil millones de personas que actualmente sufren desnutrición.