Cuernavaca, Mor. Unas 30 integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas, con la boca cubierta con tela adhesiva, protestaron ayer a la entrada de Casa Morelos –la residencia oficial del gobernador Marco Adame Castillo– para repudiar el desalojo de un centenar de electricistas realizado por policías federales el 27 de mayo en la subestación de la comunidad Teopanzolco. Las manifestantes anunciaron que este martes marcharán del zócalo de Cuernavaca al Congreso local para solicitar a los legisladores que intervengan ante el gobierno federal y éste les devuelva sus empleos, que perdieron al disolverse Luz y Fuerza del Centro, el 11 de octubre de 2009.