Lima, 8 de junio. La Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó el envío de una comisión de alto nivel a Honduras para evaluar su reincorporación al organismo regional, y apoyó a Argentina en el caso de las islas Malvinas, al concluir este martes en Lima su 40 Asamblea General.

La comisión, que estará conformado por expertos designados por el secretario general, José Miguel Insulza, deberá presentar sus conclusiones a más tardar el 30 de julio, de acuerdo con la resolución aprobada por unanimidad.

En este contexto, Estados Unidos anunció que reanudará la ayuda militar a Honduras con una donación de 25 camiones al ejército, que serán entregados en las próximas horas en Tegucigalpa por el subjefe del Comando Sur, general Ken Kee, señaló la embajada estadunidense en Honduras.

Washington suspendió la ayuda a Honduras tras el golpe de Estado de junio del 2009 contra el presidente Manuel Zelaya; la asonada motivó también la suspensión de ese país de la OEA.

Los 33 cancilleres que asistieron a la Asamblea General también aprobaron una resolución que reafirma la necesidad de que Argentina y Gran Bretaña reanuden cuanto antes las negociaciones, para encontrar una solución pacífica sobre la disputa de soberanía de las islas Malvinas.

Decidió también continuar con el examen de la cuestión de las islas Malvinas, en los sucesivos periodos de sesiones de la Asamblea General de la organización hasta su solución definitiva.

Además, los cancilleres de los países de la OEA aprobaron la Declaración de Lima, que señala la obligación de los estados que la integran no recurrir al uso de la fuerza salvo en casos de legítima defensa y de conformidad con los tratados internacionales vigentes o cumplimiento de dichos pactos.

Otro de los puntos que contiene la declaración firmada hoy es la importancia de continuar promoviendo en el hemisferio un ambiente propicio para el control en el gasto de armamento.

Por otro lado, Asamblea General llamó a los países del hemisferio a ratificar la Convención Interamericana contra la Fabricación y el Tráfico Ilícito de Armas de Fuego, Municiones, Explosivos, y adoptar a una estrategia hemisférica sobre drogas, a fin de abordar de forma integral, equilibrada y multidisciplinaria el problema.

Ese flagelo, argumentó, debilita el desarrollo sostenible de los sistemas jurídicos y de la estabilidad política y económica, lo que constituye una amenaza para la seguridad, la democracia, la gobernabilidad y el estado de derecho.