La trama, ante posible fallo judicial favorable a los internos, señalan
Jueves 3 de junio de 2010, p. 15
Familiares de los 12 presos de Atenco se manifestaron de nueva cuenta ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para exigir su inmediata libertad.
Abogados de los internos comentaron en entrevista su temor de que un posible fallo de la Corte que libere a los detenidos sea empañado por las acciones de la procuraduría mexiquense, la cual inició otros procesos penales contra los atenquenses que purgan sus condenas en el penal de máxima seguridad del Altiplano y en la cárcel de Molino de las Flores.
Los entrevistados afirmaron que tienen conocimiento de que la procuraduría mexiquense giró seis órdenes de aprehensión más contra Ignacio del Valle, Felipe Álvarez y Héctor Galindo, dirigentes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT), quienes fueron sentenciados a 112 años de prisión (el primero) y 67 años (los otros dos).
Se afirma extraoficialmente que en total son 13 las notificaciones emitidas por la procuraduría estatal, pero aún no se han podido comprobar, dijeron.
Ante la posibilidad de que la primera sala de la SCJN aplique los mismos criterios que cuando liberó a los acusados de la matanza de Acteal, los familiares y defensores de los presos de Atenco abrigan esperanzas de que los ministros ordenen la excarcelación de los 12 atenquenses.
Sin embargo, comentaron, tenemos temor de que se les inicie un nuevo proceso penal en su contra y eso los mantenga en prisión
después de la resolución del máximo tribunal.
La movilización ante la Corte se inició al filo de las 10 de la mañana. Con mantas, consignas y canciones exigieron la libertad de los detenidos.
Al filo de las dos de la tarde se sumó a la protesta un grupo de mujeres que apoya la huelga de hambre de los trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) en contra de la desaparición de Luz y Fuerza del Centro.
Con cacerolas en la mano, coreaban: ¡SME sin comer, dispuestos a vencer!
y ¡Presos políticos libertad!
Ya casi para terminar la movilización, los manifestantes, conscientes de que actualmente sólo se habla de futbol por la cercanía del Mundial de Sudáfrica, jugaron una cascarita de protesta
sobre avenida Pino Suárez, aprovechando que la arteria estaba cerrada al tráfico vehicular.