Al año ocasionan unos 4 mil 600 decesos; son necesarios tres exámenes para un diagnóstico
Gran parte de los casos se producen en DF, Jalisco y Veracruz, informó urólogo del ISSSTE
Miércoles 2 de junio de 2010, p. 43
El cáncer de próstata es la principal causa de muerte en hombres mayores de 65 años. El padecimiento ocasiona alrededor de 4 mil 600 decesos al año y entre los tumores es el segundo más frecuente en la población masculina, sólo después del pulmonar, aseguró Julio Casasola, urólogo del Centro Médico Nacional 20 de Noviembre del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
En conferencia, el especialista resaltó que aunque se desconocen las causas que originan el padecimiento, se puede diagnosticar en forma temprana y lograr su curación. Cuando los varones mayores de 40 años acuden cada año a realizarse estudios sanguíneos, ultrasonido y tacto rectal con el urólogo, es un hecho que el cáncer de próstata no los matará aunque lo desarrollen.
Advirtió que por separado ninguna de estas pruebas es determinante. Se requieren las tres para obtener un diagnóstico verídico. En particular, Casasola se refirió a la prueba clínica de antígeno prostático, que cuando resulta con niveles por encima de lo normal indica alguna anomalía, sin que ello signifique que el paciente tenga un problema maligno. Por eso se deben realizar los otros dos exámenes.
Cada año se reportan 9 mil 650 nuevos casos de cáncer de próstata y la mayor parte se concentra en el Distrito Federal, Jalisco y Veracruz. Del total de enfermos, 75 por ciento son atendidos en instituciones del sector público y entre éstas sobresale el Instituto Mexicano del Seguro Social, con 40 por ciento de los afectados.
Aunque 75 por ciento de los casos de tumores malignos se detectan entre los 55 y 65 años de edad, la enfermedad también está presente en grupos de edad menores, destacó Casasola.
Explicó que el cáncer de próstata es una inflamación de este órgano, el cual provoca dolor y alteraciones severas en el aparato urinario. De no atenderse de manera oportuna se puede extender a otras partes del organismo, principalmente huesos.
Debido a los medicamentos que se han desarrollado en los pasados 25 años se ha podido incrementar la esperanza de vida de los afectados. Una vez que el investigador canadiense Charles Huggins descubrió en 1941 que el crecimiento del tumor está relacionado con la testosterona, los laboratorios farmacéuticos se dieron a la tarea de producir fármacos que inhiben esta hormona.
Con ello se ha logrado el control de la enfermedad, al grado de que existen pacientes que han sobrevivido al cáncer de próstata por más de 10 años, explicó Casasola. Para lograrlo es indispensable el diagnóstico oportuno, en particular detectarlo cuando no ha rebasado el espacio de la próstata y se puede curar con la cirugía radical del órgano.
En estadios posteriores, la mejor alternativa son los medicamentos que bloquean la acción de la testosterona.
Al comentar sobre las causas de este cáncer, el experto mencionó que con certeza se puede atribuir a la herencia familiar y los hábitos alimenticios, pero realmente se desconoce un factor determinante para su desarrollo, a diferencia del cáncer de pulmón, por ejemplo, en el que de 75 a 80 por ciento de los casos están directamente relacionados con el consumo de tabaco.