El Servicio de Administración Tributaria (SAT) fiscalizó ayer de manera simultánea en cuatro estados del país las oficinas del despacho Inteligencia en Dirección de Negocios (IDN), el cual presuntamente asesoró a equipos de futbol para que evadiera la acción de las autoridades fiscales y no pagar las retenciones por los salarios de los futbolistas, informó el organismo.

La acción, dijo, se llevó a cabo después de diversas denuncias presentadas y de realizarse diversas investigaciones en las que el SAT detectó que esa empresa consultora internacional “asesora a sus clientes para que incurran en acciones de evasión fiscal en los esquemas de suministro de personal (outsourcing) que se realizan utilizando la naturaleza legal jurídica de diversas sociedades mercantiles”.

En su página de Internet, la compañía IDN señala que tiene clientes en más de 28 ramos, entre ellos aerolíneas, cajas de ahorro, clubes deportivos y gobiernos estatales y municipales con presencia en el país, España, Suiza, Estados Unidos y Guatemala.

En el acto de fiscalización simultánea en las oficinas de este despacho en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas; Puebla, Puebla; Monterrey, Nuevo León, y el Distrito Federal participaron más de 70 auditores del SAT y se llevó a cabo en coordinación con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS), con el apoyo de 10 agentes del Ministerio Público de la Federación y 120 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Federal.

Ésta es la segunda acción en menos de un mes en que se realizan tareas de este tipo. El pasado 21 de abril el SAT llevó a cabo una operación simultánea en siete ciudades en las que tiene oficinas el despacho Álvarez Puga y Asociados, después de que las investigaciones condujeron a contar con elementos de que esta empresa consultora asesoraba a sus clientes para incurrir, entre otras, en conductas de evasión fiscal en los esquemas de outsourcing.

En aquella ocasión, el SAT señaló que estos esquemas abusivos de sustitución laboral consisten en transferir a los trabajadores de otras empresas a sociedades cooperativas, sociedades en nombre colectivo, empresas integradoras e integradas, con el propósito de evitar el pago de reparto de utilidades, impuestos federales y locales, así como contribuciones de seguridad social.

Estas sociedades, describió, registran como socios cooperativistas o industriales al personal que se les transfiere de las empresas, de tal modo que en lugar de salarios reciben remuneraciones bajo el concepto de previsión social, alimentos, bonos u otros conceptos similares en los que omiten la retención y entero del impuesto sobre la renta correspondiente.

Hace poco más de un año, en marzo de 2009, el SAT estimó que más de 230 mil trabajadores se encontraban laborando en estas sociedades y apuntó que las investigaciones realizadas, así como las denuncias recibidas, le permitieron ubicar 19 despachos que ofrecen este tipo de planeación para evadir responsabilidades fiscales.