Con la participación de ex dirigentes estudiantiles del 68, periodistas y ciudadanos identificados con la socialdemocracia, ayer se dio oficialmente el banderazo de salida del movimiento político-social denominado Iniciativa Por México, el cual buscará incidir en la vida pública del país mediante mecanismos electorales, muy particularmente en los comicios locales y federales de 2012, con candidaturas independientes.

En vista de lo anterior, Marcelino Perelló y Luis Tomás Cervantes Cabeza de Vaca apremiaron al Congreso de la Unión a legislar sobre las candidaturas independientes lo antes posible, para facilitar la intervención de esta formación y de otras más, en las elecciones de 2012.

Consideraron desmesurado el requisito que plantea la iniciativa de reforma política del Ejecutivo de contar con un número de firmas de respaldo a la candidatura independiente igual o superior a uno por ciento del padrón, pues ello significaría que un aspirante a la Presidencia tenga que reunir para su registro casi 800 mil rúbricas de apoyo.

Esto sobrepasa con mucho lo requerido para registrar un partido nacional, agregaron. Con un candado de esa naturaleza nos enseñan el jardín, pero le ponen reja, enfatizó Perelló.

En contrapropuesta, plantearon que a los candidatos presidenciales independientes se les pueda registrar con 0.2 por ciento del padrón, lo que representa unos 150 mil nombres, que, siendo muchos, parecen más al alcance de un movimiento popular serio.

También exigieron que baste el nombre y el registro en el IFE del que brinda su apoyo al aspirante y que no sea necesaria la signatura de puño y letra, pues ello impediría la utilización de los medios electrónicos e informáticos en su recaudación.

En conferencia de prensa se les preguntó sobre su candidato a la presidencia y puntualizaron que, por el momento, no tienen una definición.

Al explicar por qué promueven las candidaturas independientes y no optan por las de partido, Perelló y Cervantes Cabeza de Vaca dijeron que no están contra los partidos políticos, pues son necesarios, pero sí contra el monopolio y la manipulación que realizan las cúpulas partidarias, las cuales  están alejadas de sus bases sociales y de la ciudadanía.

Por último manifestaron que el discurso político en México ha desaparecido, y con este movimiento se busca contribuir a su rescate, así como obligar a los partidos a retomar un discurso con contenidos políticos serios, sólidos y viables.