La dimensión que alcanzó la actividad informal es ya un problema estructural de la economía mexicana, sostuvo Luis Robles Miaja, presidente ejecutivo de la Asociación de Bancos de México (ABM).

En México, un porcentaje muy importante de los agentes económicos son informales y un reto de la banca es aprender a prestarles, aseguró en una entrevista con La Jornada.

El directivo, también vicepresidente del consejo de administración de BBVA Bancomer, apuntó que la lucha contra el crimen organizado tiene consecuencias económicas. El tema de la lucha contra el crimen organizado es un tema que afecta a todos, al país, y desde luego tiene impacto en la economía y en el sistema financiero.

La próxima semana se realizará en Acapulco, Guerrero, la 73 convención nacional bancaria, que reúne a participantes en el sector con autoridades financieras. Robles Miaja aseguró que la banca salió íntegra del proceso de crisis. Mientras la economía cayó 6.7 por ciento, el crédito aumentó 2 por ciento. Puede parecer poco, que no creció el crédito, pero si se toma en cuenta el ajuste de la economía, la dinámica del crédito fue una buena noticia.

Reconoció que existe un universo de deudores, sobre todo de tarjetas de crédito, que enfrenta problemas para pagar sus deudas. Lo que les digo es que se acerquen a su banco, siempre hay una forma de encontrar una salida y que no nos pase lo de 1995, mencionó, en alusión a la crisis de hace 15 años, que provocó la quiebra de miles de familias y empresas. Los bancos, las autoridades y los deudores aprendimos de la crisis de 1995, de los problemas del sobrendeudamiento, dijo.

Todos los bancos hemos sacado diversos programas para ayudar a nuestros clientes a transitar esta crisis, sobre todo para aquellos que, o perdieron su empleo, o disminuyeron sus ingresos por alguna causa, apuntó. En el caso de las tarjetas de crédito, informó, más de 1.5 millones de usuarios han restructurado sus préstamos en los últimos meses en todo el país.

–Entre deudores de tarjetas de crédito hay casos en que, aun con las restructuraciones, es difícil que puedan pagar, aunque quieran hacerlo ¿Incluso para esos casos extremos la banca tiene una alternativa?

–Siempre hay forma. Hay que entender que esto es cuando se actúa de buena fe. Cuando se actúa de mala fe, los bancos no estamos para regalar dinero que no es nuestro.

Robles Miaja, quien lleva un año como presidente ejecutivo de la ABM y ocupará ese puesto al menos otro año más, destacó que el gran reto de la banca para los próximos meses es dar crédito, crédito y más crédito. En ese sentido van algunas acciones, como la anunciada el martes pasado, de flexibilizar los requisitos para que pequeñas y medianas empresas obtengan préstamos bancarios.

La banca tiene que acompañar el crecimiento sostenido del país en los próximos meses y años; tiene que incrementar su participación en el financiamiento de los agentes productivos y las familias mexicanas, y ése es el gran reto. Hay muchas leyendas urbanas de que si los bancos sacamos dinero fuera, a las matrices; son leyendas urbanas, aseveró.

–Se han dado transferencias de bancos al exterior el último año. De hecho se habló de que Bancomer lo había hecho.

–Un banco tiene tres maneras de sacar dinero hacia sus accionistas: otorgándoles crédito, pagando dividendos y con una reducción de capital. El tercero lo elimino porque para un banco es muy difícil reducir su capital. El crédito está regulado (actualmente, un banco en México no puede dar crédito a sus accionistas por más de 50 por ciento de su capital). Bancomer no sacó dinero para financiar a BBVA (su casa matriz en Madrid). Lo que hizo Bancomer fue pagar un dividendo a sus accionistas, como cualquier empresa comercial o de servicios.

Luis Robles Miaja, presidente ejecutivo de la Asociación de Bancos de México, en sus oficinas en las Lomas de ChapultepecFoto Jesús Villaseca

Bancomer ha venido pagando un dividendo a sus accionistas en forma anual y no es por el 100 por ciento de la utilidad. Una parte se reinvierte continuamente y por eso ha crecido su red e infraestructura. Lo que pasó fue que el dividendo de 2009 se pagó en el tercer trimestre, periodo en que la inversión extranjera fue muy baja. Se mide cuánta inversión ingresa y se resta cuánto sale. Ingresó muy poquito y salió el dividendo de Bancomer y se vio muy feo el resultado. Eso no quiere decir que esté sacando su dinero.

–¿Qué riesgos advierte que existen para la actividad económica, sobre todo en las condiciones de violencia que existen hoy en el país ?

–En primer lugar, el tema de la lucha contra el crimen organizado es un tema que afecta a todos. Afecta a México, a todos los mexicanos y, desde luego, tiene impactos en la economía y tiene impactos también en el sistema financiero. Afortunadamente los impactos en la economía y en el sistema financiero todavía no han sido mayores, salvo en ciertas regiones y ciudades, pero a nivel nacional no se puede hablar de un impacto significativo, con excepción de las ciudades que todos conocemos y en las que no hay duda que es una tragedia lo que está pasando.

Es una lucha que tiene que continuar y en ese sentido la banca apoya sin duda alguna al gobierno de la República, afirmó.

Sostuvo que un problema estructural de la economía mexicana es la informalidad de un porcentaje muy importante de los participantes en actividades productivas.

De acuerdo con estimaciones que ha manejado la banca, la economía informal representa 40 por ciento del producto interno bruto. Estimaciones privadas ubican que en algunas regiones esa cifra incluso llega a ser de 60 por ciento. En el país hay 14 millones de trabajadores registrados ante el Seguro Social, con una población económicamente activa de 43 millones de personas en edad y condición de trabajar.

El reto de la banca también es saber, aprender a prestar a los informales. Con esto no quiero decir que quiero promover la informalidad, al contrario, expuso Robles Miaja. La informalidad es un cáncer que hay que extirpar. Pero lo que quiero dejar sentado es que si no volteamos a la informalidad y vemos cómo le prestamos, 40 por ciento de la economía mexicana se queda fuera del circuito bancario formal.

Precisamente el martes pasado, la ABM y la Secretaría de Hacienda anunciaron que los propietarios de pequeñas y medianas empresas ya no tendrán que demostrar que están inscritos en el registro de contribuyentes para solicitar un crédito bancario.

La banca ya está prestando a trabajadores informales, comentó Robles Miaja. Lo hace a través de otorgar tarjetas de crédito a personas sin ingreso fijo.

“No estoy hablando de los que venden discos pirata en la calle. Me refiero a profesionistas, médicos, abogados, contadores independientes que no necesariamente declaran lo que ingresan. Hablo de empresarios que tienen doble contabilidad, y no estamos hablando de microempresas. Yo no estoy a favor de que pase eso y de que sigan sin pagar impuestos, al contrario. Pero hay que buscar mecanismos para poder financiarlos y esto puede ayudar incluso a las autoridades hacendarias. En la medida en que estas personas crezcan y se desarrollen, pues tendrán mayores posibilidades de pagar impuestos. Creo que es un gran reto.”