Querétaro, Qro., 31 de marzo. La pederastia, los crímenes, los abortos y la violencia en general que se viven en México dan asco, afirmó el obispo emérito de Cuernavaca, Morelos, Francisco Olvera Ochoa.

Aseveró: estamos convencidos los obispos de que hay mucha violencia. Estamos convencidos de que hay terrorismo (...) A Dios y a nosotros nos duele la sangre derramada por abortos, por crímenes; nos duele la violencia contra las mujeres, el abandono de los niños, la pederastia. Da asco todo eso.

Agregó que con la presencia militar en el combate al narcotráfico, con la pura rudeza, no se consigue todo, por lo cual el gobierno federal en conjunto con los ciudadanos debe trabajar en materia de educación.

La militarización tiene su finalidad, pero no basta, la sociedad tiene que entrar, abundó.

El vocero de la diócesis de Querétaro, Raúl Ragoitia Vega, deploró que algunos curas no cumplan con sus responsabilidades: lamentamos y pedimos por aquellos hermanos que han traicionado o no han respondido a su responsabilidad y a su ser de crecer como sacerdotes, pero son mucho más los que entregan la vida y se parten el alma por las comunidades.

Olvera y Ragoitia, junto con el obispo de Querétaro, Mario de Gasperín Gasperín, y el obispo emérito de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, Samuel Ruiz, encabezaron la misa crismal oficiada este miércoles, con la cual se renovaron los votos de 215 sacerdotes.