Washington, 24 de marzo. El chileno José Miguel Insulza fue relegido hoy por aclamación como secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) para un nuevo periodo de cinco años, aunque con el apoyo condicionado de varios países al prevalecer las discrepancias sobre el concepto de “promoción de la democracia” y los objetivos del organismo regional.

Insulza, político y abogado de 66 años, tenía prácticamente garantizada la relección ya que no tuvo rivales y numerosos países habían adelantado brindarle su apoyo. Recibió el voto de los 33 miembros activos de los 35 –Honduras y Cuba no tienen representación– que conforman la organización en una Asamblea General extraordinaria.

Desde la OEA “seguiremos luchando por defender la democracia representativa que nos hemos ganado con tanto esfuerzo” en el continente, dijo tras conocer su relección.

La representante estadunidense, Carmen Lomellin, pidió una mejor labor de la OEA en la defensa de la democraci”.

Roy Chaderton, embajador de Venezuela ante la OEA, advirtió que el organismo puede tornarse “irrelevante” por no escuchar los planteamientos de las “democracias disidentes” de la región, y anunció su apoyo a Insulza “como gesto de buena voluntad”.

A su vez, la representante boliviana, Nardy Suxo, afirmó que su país se “abstenía de emitir su voto”, pero en “reconocimiento a la gestión” de Insulza no se opuso a que fuera “elegido por aclamación”.