México invierte cada año alrededor de 45 mil millones de pesos en la atención de sólo cuatro enfermedades asociadas con el tabaco, aunque la cifra podría ser mucho mayor porque entre 15 y 20 tumores malignos son provocados por esta adicción, aseguraron especialistas integrantes del Consejo Mexicano para el Control del Tabaco (CMCT).

Al presentar los resultados del primer estudio sobre los costos en salud del tabaquismo, Luz Myriam Reynales, jefa del Departamento de Investigación sobre Tabaco del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), resaltó que sólo en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) la pérdida de productividad medida por el número de días de incapacidad otorgados a los enfermos fue de 69 millones de pesos en 2009.

En conferencia, la especialista resaltó que del monto que se invierte en la atención de padecimientos asociados al tabaco, el gobierno federal sólo recauda 25 mil millones de pesos por vía del Impuesto Especial a Productos y Servicios (IEPS).

Ante ello, el senador Ernesto Saro, también presente en la conferencia, informó que en abril presentará una iniciativa de reforma legal a fin de incrementar en ocho pesos el precio de la cajetilla de cigarros, con lo que se estarían recaudando alrededor de 20 mil millones de pesos.

En cuanto a los costos, Luz Myriam Reynales destacó que en los países desarrollados se destina entre 6 y 15 por ciento de la inversión en salud a la atención de enfermedades provocadas por el tabaquismo. México se encuentra en ese rango, que además equivale a entre 0.3 y 0.43 del producto interno bruto.

La investigación se concentró en la medición de gasto de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), cáncer de pulmón, infarto agudo al miocardio y enfermedad cerebro vascular (ECV) en los institutos nacionales de Enfermedades Respiratorias, Cardiología, Cancerología y Neurología. Además, participaron los hospitales de la Secretaría de la Defensa Nacional y del IMSS.

En conjunto para estas instituciones, la inversión para el tratamiento de enfermos ascendió en 2009 a 560 millones de pesos.

A esta cifra se suman 69 millones de pesos por la productividad perdida entre los derechohabientes del Seguro Social. Reynales destacó que de este monto, casi 49 millones se debieron a infartos agudos al miocardio, padecimiento totalmente prevenible.

Al extrapolar las cantidades a la realidad nacional, los investigadores estimaron en 45 mil millones de pesos lo que el país destina a estos mismos problemas de salud.

En su turno, el senador Saro comentó que ya se realiza una labor de cabildeo con las secretarías de Hacienda y Economía, a fin que evitar que desde el propio gobierno federal exista alguna oposición a la iniciativa de reforma de ley de los legisladores, quienes también plantearán que lo obtenido por la vía impositiva se destine a programas preventivos de salud.

El legislador, presidente de la Comisión de Salud del Senado, reconoció que muy probablemente el proyecto se aprobará en el periodo de sesiones que se inicia en septiembre. Sin embargo, la finalidad es evitar que la discusión se contamine con la negociación del paquete fiscal, como ocurrió en noviembre de 2009, en que el tema de los impuestos al tabaco se convirtió en pieza de cambio, admitió.

Dijo que por esa razón no prosperó el proyecto aprobado por los senadores que buscaba incrementar en dos pesos el precio de la cajetilla de cigarros. Los diputados acordaron aplicar dicho aumento, aunque de manera gradual, entre 2010 y 2013.

También comentó que ya se realiza una labor de información entre los diputados, primero con los aproximadamente 65 que son médicos, para que de entrada la propuesta sea presentada por decenas de legisladores en ambas cámaras y con ello, además, que no surja sólo de las comisiones respectivas, donde el cabildeo de las tabacaleras es más efectivo.

Al respecto, Sonia Meza, coordinadora de Iniciativas para el Control del Tabaco del CMCT, explicó que también tendría que modificarse la Ley de Ingresos para asegurar que una parte de los recursos obtenidos se destinen a temas de salud.