El secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, subrayó ayer que en una sociedad democrática sólo la autoridad puede usar la fuerza para proteger al inocente y sólo la autoridad puede emplear la fuerza para someter a quien se resiste a ser sometido, tratándose de un delincuente.

Al participar en la inauguración de las Jornadas Nacionales por la Cultura de la Legalidad y el Estado de Derecho, convocadas por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Gómez Mont destacó: La autoridad es ciega y sorda si no tiene ni el respaldo ni la vigilancia ni la supervisión ni la colaboración de la ciudadanía.

El titular de Gobernación precisó que a esa autoridad no le llega la información atendible, “que todos conocemos, sobre las situaciones de riesgo que existen a nuestro alrededor: dónde están los picaderos, dónde se dan los fenómenos de violencia, dónde se concentran personas que causan temor a sus vecinos; ésa es la información que requiere una autoridad para poder proteger”.

El funcionario dijo que en el Senado se discuten reformas para consolidar un sistema de seguridad para ir acercando la solución a los ciudadanos, para ir desplazando en el tiempo aquellas fuerzas federales que no tienen como tarea natural la seguridad pública, sino la defensa de la integridad territorial y la atención a las emergencias. Ésa es una discusión que se debe acelerar para llegar a consolidar la institución de seguridad democrática que sea capaz de infundir confianza en la ciudadanía.

Por su parte, el ombudsman nacional, Raúl Plascencia Villanueva, subrayó que el origen de algunos de los grandes problemas para la CNDH se traducen en un tema: el cumplimiento efectivo de la ley.

Advirtió que la comisión ve un país donde existen varios actores que todavía no han asumido un compromiso de respeto a la ley, no sólo en el caso de las autoridades, sino también de la sociedad; esta situación nos ha llevado a crisis que no merecemos y que no debemos tolerar.

Subrayó que en los casi 20 años de vida institucional la CNDH ha evidenciado un sinnúmero de violaciones a la ley y múltiples injusticias, pero también hemos observado que muchas personas no cumplen con los deberes que tienen para consigo mismas, sus familias, con la sociedad y con México.

Plascencia dijo que ´rste es el momento oportuno para robustecer las bases del estado de derecho que hoy tenemos y que unidos cimentemos el país de leyes que todos anhelamos, asumiendo ese desafío. El trabajo sin duda será difícil, no será de un día para otro, quizá de meses o de años; lo importante es que demos el primer paso los que estamos aquí presentes.

En su turno, el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Guillermo I. Ortiz Mayagoitia, dijo que la cultura de la legalidad se justifica plenamente en este momento, cuando existen acontecimientos que parecen convocar a los más jóvenes de nuestra sociedad al dinero fácil, a la vida ociosa y al convencimiento de que la norma jurídica es un estorbo que no merece respeto, porque la ley se puede violar impunemente.