En 15 años los propietarios regulares y no regulares de las tierras que antes fueron ejidales y comunales, llegó a 2 millones y al mismo tiempo se redujo la superficie cultivable, señaló el presidente magistrado del Tribunal Agrario, Ricardo García Villalobos. Precisó que 33 por ciento de las tierras han pasado a manos de personas ajenas a esas comunidades.

Se refirió a que en el manejo de subsidios en el campo se debe tener cuidado porque la infiltración puede ser muy sencilla, y regularmente no hay una base estructural para vigilar que efectivamente el crédito concedido vaya al destino para el cual se otorgó.

En conferencia de prensa, luego de rendir su informe, agregó que hay prestanombres, cómplices y en todo esto la gente de la provincia sabe mucho, porque detectan cuando llega alguien a crear una nueva estructura agrícola, ganadera o forestal y de la noche a la mañana crece un emporio.

El campo es un tema de seguridad nacional, pues también se requiere de seguridad alimentaria, no podemos permitir que no podamos sembrar y depender de las importaciones, lo cual es prácticamente una esclavitud.