En sólo un bimestre se equiparó al incremento a los salarios que regirá todo el año
El repunte obedece al aumento en el precio de la gasolina, según Invex Casa de Bolsa
Miércoles 10 de marzo de 2010, p. 26
La inflación en febrero pasado fue la mayor en los últimos seis años y llegó a un nivel que, transcurrido sólo un bimestre, se equiparó al incremento a los salarios decretado para todo 2010. El conjunto de alimentos registró un alza de precios mayor al promedio general, e igual ocurrió con el transporte público, dos de los renglones de mayor impacto en el bolsillo de la población.
El índice nacional de precios al consumidor (INPC), que mide el comportamiento de la inflación general, repuntó en febrero a una tasa anual de 4.83 por ciento, superior a la tasa anual de enero anterior, que había sido de 4.46 por ciento, informó el Banco de México este martes.
En particular, en febrero la inflación fue de 0.58 por ciento, la más alta para un periodo similar en seis años, agregó el banco central. El repunte de la inflación obedece al aumento en el precio de la gasolina
, comentó Ricardo Aguilar Abe, analista de Invex Casa de Bolsa.
Como otros impuestos, el alza en los precios de la gasolina, electricidad y gas fue dispuesta por el gobierno federal como resultado de la negociación presupuestal a finales del año pasado, que fue aprobada por las bancadas de los partidos Acción Nacional y Revolucionario Institucional.
Además del alza en los combustibles, otro factor que determinó que la inflación superara el pronóstico de analistas financieros fue el comportamiento en el precio de productos agropecuarios, tradicionalmente afectado por cuestiones meteorológicas.
Los precios agropecuarios impulsaron la inflación arriba de las expectativas
, opinó Arturo Vieyra, analista de Banamex.
En los últimos 12 meses la inflación general aumentó 4.83 por ciento, un incremento comparable al 4.85 por ciento en que fueron elevados los salarios mínimos –indicador de referencia también para las negociaciones contractuales– en diciembre pasado, y que no será movido hasta finales de este año.
En productos de consumo generalizado, las alzas superaron, en algunos casos varias veces, el promedio general. El conjunto de productos alimenticios tuvo en los 12 meses anteriores un incremento de 6.03 por ciento, de acuerdo con el banco central. En el periodo de referencia el precio final de la cebolla se elevó 166 por ciento; el del jitomate 43, y el del tomate 28 por ciento. El precio promedio de la papa aumentó 44 por ciento; el de los nopales, 26, y el del azúcar 88 por ciento. La tortilla de maíz elevó su precio en 7.4 por ciento.
Otro renglón que consume parte importante del dinero de las familias en los estratos de menor ingreso es el transporte. En este caso, según los datos divulgados ayer por el banco central, el precio nacional promedio del transporte urbano subió 7.4 por ciento en los 12 meses precedentes, arriba de la inflación general y de las alzas salariales. Lo mismo ocurrió con las tarifas eléctricas, que repuntaron 7 por ciento.
Otros incrementos arriba del promedio general fueron los de la cerveza, con un alza de 12.6 por ciento en los 12 meses anteriores, y los cigarrillos, 9 por ciento.
La inflación podría ubicarse por encima del intervalo estimado del banco central hacia el cierre del año, esto por una probable contaminación de mayores precios de gasolina hacia los precios de otros bienes y servicios
, comentó Aguilar Abe. Los incrementos en el precio de la gasolina continuarán a lo largo de 2010.
Decisiones de política económica tienen influencia directa sobre el comportamiento de los precios, como es el caso del alza de impuestos y al precio de la gasolina, aunque el banco central ha mencionado que este efecto será transitorio.
La inflación sigue aumentando de la mano de la política de precios públicos, de la política fiscal vigente, así como por presiones de los precios agrícolas
, comentaron a su vez los analistas de BBVA Bancomer Pedro Uriz Borrás y Octavio Gutiérrez Engelmann.
En febrero, la inflación no subyacente –que incluye precios de comportamiento volátil, como agropecuarios y los que fija el gobierno– aumentó 1.08 por ciento mensual, y en términos anuales, 5.4 por ciento. En enero el crecimiento anual había sido de 3.8 por ciento. El subíndice de precios agropecuarios tuvo un aumento anual de 7.37 por ciento, consistente con el presente ciclo agrícola, según analistas de Bancomer.
La política fiscal y de precios públicos vigentes continúa generando un fuerte impacto en la inflación anual, que se mantiene contenido en las rúbricas directamente afectadas
, apuntaron. “El relativamente moderado aumento de la inflación subyacente –que no incluye los precios más volátiles– puede estar señalando que los impulsos inflacionarios de la política fiscal, particularmente en los servicios, están siendo moderados por el impacto del ciclo económico”, de menor consumo, añadieron. Sin embargo, no descartaron que en la medida en que la reactivación económica avance, los precios se ajusten al alza con mayor ímpetu.