Cuernavaca, Mor., 28 de febrero. El secretario de Gobierno de Morelos, Jorge Morales Barud, reveló que los tres auxiliares y el médico legista que fueron suspendidos el pasado 28 de diciembre acusados de haber alterado la escena donde fue abatido el capo Arturo Beltrán Leyva, El jefe de jefes, serán reinstalados en sus cargos, toda vez que la revisión jurídica –que no ha concluido– apunta a que son inocentes.

En entrevista, el funcionario estatal dijo que es cuestión de días para que Víctor Hugo Reyes Cruz, Andrés Barrera Valerio, Manuel Reyes Cruz y el médico legista Clemente Jaramillo, regresen a trabajar.

Este 28 de febrero los cuatro trabajadores de los Servicios Periciales de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) de Morelos cumplieron dos meses de estar suspendidos y de no cobrar sueldo.

Se está trabajando en la revisión jurídica; todo indica que así será (las reinstalación de los cuatro peritos), en cuestión de unos días. Esas decisiones las toma el procurador (Pedro Luis Benítez) con base en la ley, pero de las conversaciones que he sostenido con él, y el análisis que se ha planteado, veo amplias posibilidades de que así será.

Así respondió Morales Barud al exhorto que emitió el pasado miércoles el Congreso local al gobernador panista Marco Antonio Adame Castillo para reinstalar en sus cargos a los trabajadores de los Servicios Periciales de la PGJE que levantaron el cuerpo del narcotraficante.

El punto de acuerdo –aprobado de manera unánime– demanda al mandatario que instruya a la PGJE para que ésta, a su vez, levante la suspensión a los tres auxiliares y el médico legista, la cual les fue interpuesta por la visitaduría general de la dependencia el 28 de diciembre.

Para varios diputados locales, Víctor Hugo Reyes Cruz, Andrés Barrera Valerio, Manuel Reyes Cruz y el médico legista Clemente Jaramillo fueron suspendidos de manera injusta, pues sólo obedecieron las órdenes de sus superiores de levantar los cadáveres tras el enfrentamiento entre elementos de la Marina y miembros del cártel de los Beltrán Leyva, el 16 de diciembre en el fraccionamiento Altitude.

Los cuatro peritos han manifestado en diversas oportunidades que ellos sólo cumplieron las órdenes de sus superiores; que no fotografiaron el cuerpo con billetes y joyas de Arturo Beltrán Leyva; que cuando ellos ingresaron al complejo residencial el cuerpo del narcotraficante ya había sido movido, y que lo único que hicieron, por órdenes de los marinos, fue acomodar los billetes y joyas encima del cadáver.