Mundo
Ver día anteriorViernes 26 de febrero de 2010Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Es un órgano utilizado por el imperio para agredir, sostiene el presidente venezolano

Chávez amenaza con abandonar la CIDH
Foto
Hugo Chávez, presidente de Venezuela, bromea con periodistas en una rueda de prensa, ayer en CaracasFoto Reuters
 
Periódico La Jornada
Viernes 26 de febrero de 2010, p. 23

Caracas, 25 de febrero. El presidente venezolano Hugo Chávez amenazó con abandonar la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), luego del informe que el organismo emitió la víspera sobre la situación de las garantías individuales en el país, el cual tachó de ignominia.

El mandatario dijo que abandonará ese organismo por considerarlo un cuerpo politizado y utilizado por el imperio para agredir a los gobiernos, y reiteró su convicción de que en un futuro cercano la Organización de Estados Americanos, del cual depende la CIDH, desaparecerá.

Caracas se va a preparar para denunciar el acuerdo mediante el cual Venezuela se adscribió a esa nefasta Comisión Interamericana de Derechos Humanos y salirnos de ahí, afirmó, tras considerar el informe pura basura.

En el texto, la CIDH observó un Estado de derecho en Venezuela que se ha debilitado por la falta de separación de los poderes, a la vez que alertó sobre serias restricciones a los derechos humanos.

Es un informe ignominioso de la inefable CIDH constituido por una colcha de retazos, dijo el presidente al recordar que es la misma comisión que apoyó a Pedro Carmona Estanga, quien encabezó un gobierno de facto que se instaló en Venezuela durante el fallido golpe de Estado que sacó durante dos días del poder a Chávez en abril de 2002.

Por otro lado, manifestó su deseo de conversar con el presidente de Colombia, Álvaro Uribe, y poner las cosas sobre la mesa pero sólo si cesan las agresiones de Bogotá. Según Chávez, en Colombia hay una campaña mediática destinada a crear una permanente animadversión hacia Venezuela por miedo a un contagio de la revolución bolivariana.

Se refirió también al altercado verbal que sostuvo con Uribe durante la cumbre de Cancún. Fue un lamentable incidente que atribuyo a las muchas presiones que debe tener el presidente colombiano dentro y afuera. No es fácil ser anfitrión del imperio, dijo al referirse al uso de bases militares colombianas por parte de fuerzas estadunideneses.

Sobre la nueva organización comunitaria de Estados latinoamericanos y del Caribe, surgida tras la cumbre del Grupo de Río, aseguró que no es un pacto antiestadunidense, sino un pacto por la unidad” de la región.

A su vez, el embajador en Washington Bernardo Álvarez, pidió a Estados Unidos aclarar la postura frente a Venezuela porque, dijo, por un lado pide diálogo y por otro emite informes en el que cataloga a Caracas como una amenaza para ese país.

El embajador se refería a un informe que el director de Inteligencia Nacional, Dennis Blair, entregó al Senado estadunidense hace un mes, el cual afirma que Chávez busca imponer un modelo que socava la democracia en Venezuela y es una amenaza para la seguridad estadunidense.

Ese tipo de reportes, dijo Álvarez, tienen un efecto dentro de Venezuela y alientan a medios opositores y a sectores antagónicos del presidente que no han desechado meterse por el camino no democrático... Nos referimos a cualquier situación que contribuya a la desestabilización del país.

También pidió que en el informe anual del Departamento de Estado sobre la lucha antidrogas que será divulgado pronto, Washington reconozca que los logros venezolanos han sido impresionantes, como un primer paso para dar una muestra clara de que quiere relaciones de mutuo respeto.

Washington respondió a las declaraciones de Álvarez con una posición de apertura, pero señaló que se necesita una base para tener un diálogo significativo, y en estos momentos Caracas está jugando un papel no muy constructivo en la región, dijo Philip Crowley, vocero del Departamento de Estado.